Voy por el Mundo
Chile: historia y aventura a pocos kilómetros
No muchas capitales tienen la posibilidad de tener en cercanías ámbitos rurales que permitan realizar cabalgatas.
No muchas capitales tienen la posibilidad de tener en cercanías ámbitos rurales que permitan realizar cabalgatas.
Entre la cordillera y la costa, Santiago de Chile incentiva el desarrollo de barrios contrastantes. Están los selectos y exclusivos, y los populares, que abren sus jurisdicciones al costumbrismo y tradiciones que custodian el alma de los chilenos.
No se trata de un comentario sobre la saga de películas con ese título, sino de una visita al desierto de Atacama y la posibilidad, para un citadino, de volver a ver la Vía Láctea. Y, además, de conocer las termas de Puritama y los Géiseres del Tatio.
En un predio de 489 hectáreas ubicado a pocos kilómetros de Futaleufú, en plena cordillera de los Andes y a 10 kilómetros de la frontera con Argentina, cerca de Esquel, se inauguró Uman Lodge.
El norte chileno es pródigo en su geografía: un clima agradable, extensas playas que bordean el océano Pacífico y tres productivos valles integran un tentador combo turístico. La claridad de los cielos atrajo a numerosos observatorios científicos internacionales.
Puerto Natales es la puerta de entrada al Parque Natural Torres del Paine, uno de los destinos turísticos más hermosos que se pueda imaginar. Combinarlo con un crucero por los fiordos chilenos puede llegar a convertirse en uno de esos viajes inolvidables.
El reconocido centro de esquí chileno está a dos horas y media de Santiago, la capital, y a seis kilómetros del túnel internacional Cristo Redentor, paso fronterizo entre los dos países. En esta temporada, el complejo sumó chalés para su oferta de alojamiento.
Las características geográficas de Chile hacen que la cordillera sea una protagonista tan cercana como el mar. En materia de complejos invernales, el centro de esquí de Valle Nevado está a 30 kilómetros de Santiago, la capital, y a 60 kilómetros del aeropuerto.
La ciudad, bañada por el océano Pacífico, tiene un ritmo propio y late con el puerto. Arriba en los cerros, barrios cerca del cielo, agrupan la bohemia, la música y el arte.
Cuando el avión sobrevuela el desierto, los viajeros se deslumbran con esa amplia extensión de arena que cambia su fisonomía dorada conforme sopla el viento. San Pedro de Atacama es el pequeño pueblo que recibe con aventuras, tradiciones y servicios de primer nivel.
El vecino Chile ofrece hermosos paisajes, desde cuevas hasta lagos cristalinos y cumbres siempre nevadas, en la región más austral que comparte con Argentina.
Cuando se visita la Patagonia chilena, hay que recordar al momento de armar el equipaje que el viento sopla mañana, tarde y noche, durante todo el año.
En el norte chileno, se encuentra la región de Coquimbo, capital de la provincia de Elqui. La conurbación de la ciudad de Coquimbo, con su vecina La Serena, amplió la franja costera en una sucesión urbana de cara al mar.
El bosque nativo y los cerros que rodean al centro termal y de esquí Chillán cobijan la rica biodiversidad típica de los ambientes cordilleranos.
El enclave de montaña ubicado a 112 kilómetros de Concepción y a 82 kilómetros de la ciudad de Chillán es exclusivo. El bosque nativo y los volcanes cordilleranos son la escenografía de una combinación perfecta: nieve y termas.
A dos horas de Santiago de Chile o poco más de tres de Mendoza, en plena cordillera chilena, se encuentra Ski Portillo, centro de deportes de nieve de nivel internacional. El complejo es apto no sólo para esquiar, sino también para descansar y socializar.
El Hotel Portillo tiene una rica historia. Inaugurado en 1949 por el gobierno chileno, fue vendido a los norteamericanos Bob Purcell y Dick Aldrich a comienzos de la década de 1960.
Buena pregunta: ¿qué tiene Portillo que atrae a los esquiadores y a quienes no lo son?