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Tres destinos en América para una escapada eco-friendly

Se sugiere viajar a las Islas Galápagos en grupos chicos, para minimizar el impacto en la vida salvaje y en su entorno. (123RF)
Se sugiere viajar a las Islas Galápagos en grupos chicos, para minimizar el impacto en la vida salvaje y en su entorno. (123RF)

Estos son algunos de los lugares que Lonely Planet eligió por sus iniciativas vinculadas con el turismo sustentable.

Cada vez más viajeros en el mundo se suman a la ola del turismo sustentable. En ese marco, Lonely Planet destacó a algunos destinos por las medidas que están aplicando para minimizar el impacto del turismo en el ambiente. Tres de ellos se encuentran en América.

1. Las Islas Galápagos

En las remotas islas ecuatorianas, son varios los alojamientos que están llevando adelante acciones para proteger el ambiente y para contrarrestar el costo ambiental que implica para los viajeros llegar a destino.

Los ejemplos incluyen el uso de materiales reciclables, la recolección de agua de lluvia y programas de reforestación.

Desde el lado de los viajeros, el consejo es viajar en grupos chicos, para minimizar el impacto en la vida salvaje y en su entorno.

2. Las Bahamas

Otro destino que adhiere al movimiento eco-friendly son las Bahamas, donde también hay numerosas propiedades que apuntan a proteger el ambiente.

Algunos hoteles funcionan al 100 por ciento con energía solar, mientras que otros apoyan a las comunidades locales asegurándose de que todos sus empleados sean originarios de las Bahamas.

Por otro lado, y más allá de estos casos particulares, desde el 1° de enero de este año el Gobierno del país prohibió la importación y la utilización de los plásticos de un solo uso con el objetivo de cuidar la flora y la fauna locales.

3. Costa Rica

Costa Rica tiene un propósito más ambicioso: convertirse, en 2021, en el primer país neutro en la emisión de dióxido de carbono a nivel mundial.

Actualmente, casi toda su electricidad proviene de fuentes renovables, y su próximo proyecto apunta a modificar el sistema de producción de café.

Este producto es el que más exporta el país, pero también el que más emisiones de dióxido de carbono genera. Por eso, el plan es aprovechar el gas que produce la descomposición de los residuos de café y usarlo para accionar motores de combustión.

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