Marcha cicloturística por el Camino Real

Se realizará el próximo fin de semana por un recorrido de 124 kilómetros. Largada y llegada serán en San José de la Dormida, típica población del norte provincial.

Dos jornadas a pleno pedal para recorrer 124 kilómetros desde San José de la Dormida y continuar por las pintorescas calles de Villa Tulumba, el mítico trazado del Camino Real al Alto Perú, los bosques de palma caranday y Caminiaga.

El recorrido abarcará Cerro Colorado con sus ancestrales pictografías, las sierras de Ambargasta y parajes de ríos y arroyos.

Comenzará el sábado 22 a las 8.30 en la plaza San Martín de San José de la Dormida y culminará el domingo 23 con un gran almuerzo en la misma localidad. La propuesta no es una competición sino una convocatoria para los aficionados al cicloturismo.

Primer día

Partida desde San José de la Dormida con rumbo a Villa Tulumba en un recorrido de 25 kilómetros. En Villa Tulumba se realizará el almuerzo y a continuación se llegará hasta el balneario Las Juntas distante 13 kilómetros. Seguirán en el derrotero La Toma (a 15 kilómetros) El Perchel (7 kilómetros) y Caminiaga (15 kilómetros), donde se concretará la cena.

Segunda jornada

En Caminiaga se desayunará y se emprenderá la marcha hacia Cerro Colorado, distante 17 kilómetros y seguidamente a Churqui Cañada a 11 kilómetros. Luego proseguirá rumbo a Guayascate, a siete kilómetros y regreso a San José de la Dormida ubicado a 14 kilómetros. Allí se realizará el almuerzo.

Frente a la plaza San Martín, de esa localidad, la antigua Parroquia San José, bendecida por el Santo Obispo Fray Mamerto Esquiú, resalta desde lejos por sus imponentes y esbeltas cúpulas.

Desde aquí empieza un recorrido por la calle que fue parte del Camino Real que comunicaba el puerto de Buenos Aires con el Alto Perú.

Sobre esa avenida principal se encuentra el histórico árbol Aguaribay, donde los lugareños afirman que se emplazaba la posta que brindaba servicios a los viajeros del Camino Real.

El legado de pueblos originarios es fundamental para entender la historia de La Dormida, así lo testimonian “Los Morteritos”, yacimientos arqueológicos ubicados en zona urbana.

En el renovado Museo Regional Sanavirón se exhiben las piezas de ese pasado aborigen y se exponen objetos de la etapa gauchesca y de los primeros años de la consolidación del pueblo.