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Curiosidades de Cerro Colorado

El destino concentra una de las reservas arqueológicas más importantes del país y es el terruño que enamoró al más grande folklorista argentino. Aquí, algunos detalles que probablemente no conocías.

El norte cordobés tiene una de las reservas de pictografías más importantes de Argentina, que incluye más de 100 aleros con representaciones hechas desde hace 1.500 años hasta hace 400 años. Además, el lugar recibió la visita de un artista que lo hizo famoso. “Llegó a Cerro Colorado y se aquerenció”, dice la canción. Y fue amor a primera vista entre Atahualpa Yupanqui y la zona.

En Cerro Colorado, los guías del Museo de Antropología brindan abundante información sobre los comechingones y los sanavirones, y acerca de las pictografías. De estos dibujos se pueden visitar muy pocos (sólo tres aleros), ya que la mayoría está en propiedad privada y no se autoriza el acceso.

Este paraíso está a menos de dos horas de Córdoba y encierra muchos datos que sorprenden:

1. Uno de los amigos de Atahualpa Yupanqui, que todavía vive en Cerro Colorado, no duda en afirmar que “lo de Atahualpa con el cerro fue amor a primera vista”. Es Don Argañaraz, quien orgullosamente muestra cartas en las que Yupanqui lo llama su amigo. Con 80 años, parece mucho más joven. Tiene fotos con el músico, cartas y recuerdos que lo hacen emocionar. “Atahualpa decía que un amigo es uno mismo en otro cuero y decía que yo era su amigo, así que me siento Atahualpa en otro cuerpo”, explica, mientras sigue atendiendo en el almacén que tiene junto a la posada que administra con su hijo. Cuenta que Yupanqui pidió que sus cenizas se lanzaran en el roble que está en su casa del cerro. Después, el Chúcaro –el famoso bailarín– hizo el mismo pedido, y sus cenizas están allí junto a Atahualpa. Un canto a la amistad. Además de visitar a Don Argañaraz, hay que ir a la casa museo del folklorista.

2. En el año 1961, el Poder Ejecutivo nacional declaró al Cerro Colorado como Monumento Histórico Nacional por decreto 881/61.

3. Betty Medina es una artesana no vidente de Cerro Colorado y dicta cursos para que no se pierda esa forma artesanal de producción. Se moviliza para todos lados en su yegua. Conocer su historia vale la pena.

4. Cerro Colorado tiene 560 plazas, entre 25 cabañas, 11 hospedajes, un hotel y una posada, y 43 casas de campo.

5. La casa-pozo es una construcción realizada a la manera de las viviendas de los comechingones, para que los visitantes puedan conocer cómo era el espacio en el que habitaban los pueblos originarios. En el mismo predio se encuentra el restaurante La Salamanca, donde pueden probarse deliciosas empanadas mientras se disfruta de las vistas al cerro.

6. Marcelo Vena es un artesano que ha ganado varias veces premios en la Feria Internacional de Artesanías y en otros eventos. También enseña guitarra, brindando la posibilidad de aprender o de perfeccionarse en este instrumento en las tierras de Atahualpa.

7. Una gran parte de las nuevas generaciones escuchó hablar de Atahualpa por primera vez en la voz de Soledad Pastorutti. La canción A Don Ata fue uno de los grandes éxitos de la “Sole”. Dice: “Se viene aclarando el día, por el Cerro Colorado, y en las esquinas del churqui, se estrella un rayo cortado, despierta la añera, por la gulchaqueña, San Francisco del Chañar y también Santa Elena”.

8. En la votación organizada por La Voz para elegir las siete maravillas de la provincia, el Cerro Colorado quedó en el cuarto lugar.

9. En el norte cordobés se pueden conocer muchas otras historias. Neruda, Rafael Alberti y Octavio Pinto dejaron su huella en Totoral; en Sinsacate estuvo San Martín y velaron los restos de Facundo Quiroga; y por las últimas postas del camino Real, en Pozo del Tigre, anduvieron Belgrano y Liniers.

10. En Cerro Colorado hay celebraciones durante todo el año. El 23 de mayo se reúnen guitarristas para conmemorar el fallecimiento de Yupanqui. En Semana Santa tiene lugar un particular vía crucis desde la capilla Virgen de Guadalupe hasta la gruta Virgen del Valle. En agosto hay homenaje a la Pachamama, y en noviembre se realiza la cabalgata yupanquiana por los cerros, con noche de guitarra y asado criollo. Las fiestas patronales, del 2 al 11 de febrero en honor a la Virgen de Guadalupe, son de los eventos más grandes de la zona, y terminan con una procesión de antorchas que bajan desde el cerro.

Datos útiles

CÓMO LLEGAR: Cerro Colorado se ubica a 160 kilómetros de la ciudad de Córdoba. Hay que tomar la ruta 9 y luego la ruta provincial 21, que nos lleva directamente a destino.

PASEOS: un plan interesante es conocer la casa museo de Atahualpa Yupanqui. Se encuentra abierta de martes a domingo de 10 a 18. También se pueden visitar algunas de las pinturas rupestres del cerro, dibujadas por comechingones y sanavirones. En Villa María del Río Seco, por otro lado, está la casa natal de Leopoldo Lugones.

ALOJAMIENTO: en Cerro Colorado, hospedarse en El Descanso del Indio cuesta $ 607 por persona. También está la opción del Hotel Cerro Colorado, donde cobran $ 305 por adulto.

GASTRONOMÍA: una buena alternativa es el restaurante Purinqui Huasi. En La Salamanca hay comidas típicas imperdibles. Y en Santa Elena, una parrillada con muchas especialidades.

MÁS DATOS: la oficina de la Agencia Córdoba Turismo está sobre la calle principal de la comuna. En la web: cordobaturismo.gov.ar/localidad/cerro-colorado.