Camino del Vino, alternativa turística

Elegido por los amantes del enoturismo, el circuito riojano cuenta con 35 bodegas y Chilecito se posiciona como el mayor polo vitivinícola, al concentrar el 75 por ciento de los establecimientos.

El resto, están emplazados en los pueblos de la Costa Riojana, donde se pueden visitar fincas y degustar de estos elixires.

En paralelo, la provincia que atesora el torrontés como emblema, se prepara para la cuarta edición de la Fiesta Nacional de Torrontés, que se desarrollará en Chilecito, el próximo viernes 30 y el sábado 1 de diciembre. Como en las tres ediciones anteriores la celebración se desarrolla con un festival folklórico con la participación de importantes artistas nacionales.

Circuito artesanal. Desde la ciudad de La Rioja, hacia al norte por la serpenteante ruta 75 y bordeando las Sierras de Velasco, una cadena de poblados conforman la singular Costa Riojana. En este corredor, los pequeños productores vitivinícolas idearon un nuevo circuito de vinos artesanales.

Algunas de las bodegas ofrecen servicios de degustación, como Casa India en el pueblo de Agua Blanca; Los Navarros y Parrales de la Costa.

Hay que tener en cuenta que en toda La Rioja hay 114 productores caseros sobre los 900 que hay en todo el país.

Finca Lomas Blancas, en Sanagasta, dio sus primeros pasos con la producción artesanal y hoy ya elabora a nivel industrial con uvas torrontés riojanas provenientes de viñedos propios. En el establecimiento ofrece degustaciones y explicaciones de todo el proceso productivo.

Entre la amplia gama de vinos de autor, San Huberto parece ser una infiltrada por su gran escala. Además de una bodega en Anillaco y 200 hectáreas de viñedos, cuenta con otra en Mendoza. En total, alcanza una capacidad de elaboración de 700 mil cajas por año.

El proyecto productivo Bodega y fincas de Aminga, que corresponde a una Sociedad Anónima con Participación Estatal Mayoritaria (S.A.P.E.M.), fue re inaugurada en marzo pasado en el marco del Programa La Costa Productiva.

La propuesta incluye la recuperación de la antigua bodega emblema de la ciudad de Aminga, que estuvo cerrada y abandonada durante 30 años. En este marco de restauración se está construyendo una hostería, fincas de uva y pasas, nogales, almendros, pistacho, y horticultura, entre la que se destaca el pimentón rojo y la manzanilla.

En Villa Unión, en el departamento de Felipe Varela, al noroeste de la provincia, Haras San José completa el capítulo artesanal. Es un complejo enoturístico que combina la bodega con hospedaje en cabañas de campo, abrazado por viñedos.

Los destacados. Los Valles del Famatina son el escenario de las bodegas industrializadas con tecnología de punta. Esos establecimientos, de reconocimiento internacional, elaboran vinos jóvenes y de alta gama, que se exportan a más de 25 países.

En la ciudad de Chilecito, la Cooperativa La Riojana es la más grande de la provincia y es reconocida como pionera en la elaboración de la cepa torrontés riojano. Hoy tiene 80 pequeños productores que aportan el 20 por ciento de la producción y los medianos, el 80 por ciento restante. A pocos kilómetros del cordón del Famatina, Chañarmuyo Estate es el primer hostal riojano pensado para los fanáticos del vino. Sus cuidados viñedos están a 1.720 metros sobre el nivel del mar y acomodados sobre 100 hectáreas al pie de la cadena del Paimán.

En Vichigasta, en las afueras de Chilecito, Valle de la Puerta es una moderna bodega, que tiene una producción anual de tres millones de litros. La mejor cepa, según el gerente de Bodega & Viñedos, Javier Collovati, es la bonarda.

Celebración. La Fiesta Nacional del Torrontés rinde homenaje a la cepa emblemática de la provincia producto de la uva blanca Torrontés Riojano y convoca a expertos de todo el país y a amateurs amantes del vino. Reconocido a nivel mundial -a pesar de su origen español-, el Torrontés Riojano tiene caracteres propios de la Argentina.

Más información: www.turismolarioja.gov.ar