Villa Traful, paraíso patagónico

Naturaleza en su máxima expresión para ser admirada y disfrutada; tranquilidad para desconectarse del mundo, y silencio para relajarse. Esa es la fórmula que propone Villa Traful, en la zona de los Siete Lagos, provincia de Neuquén.

A 58 kilómetros de Villa La Angostura y en el entorno de la ruta de los Siete Lagos, se encuentra uno de los rincones secretos de la hermosa geografía patagónica: Villa Traful.

Como un secreto escondido del sur del país, el lugar es ideal para disfrutar de la naturaleza pura rodeada de increíbles montañas, donde además de hacer un paréntesis y desconectarse, se puede hacer avistaje de aves, trekking, buceo y degustar comida regional de primera calidad.

Fundada en 1936, Villa Traful es parte del Parque Nacional Nahuel Huapi. Hoy cuenta con tan sólo 350 habitantes, lo que permite que los locales reciban a los turistas como familiares o amigos que los visitan.

El lago Traful es uno de los principales atractivos de la zona, con sus aguas cristalinas, de un color único esmeralda aturquesado, que deja sin aliento a quienes, en el absoluto silencio y el perfume de los bosques que lo rodean, se toman el tiempo de mirarlo.

La villa se levanta hacia la montaña, por sobre la ruta provincial 65, con un cambio de postal a partir del inicio de la primavera y en el verano, cuando sus paisajes se salpican con los colores de la flora y dan cobijo a la increíble fauna de la zona.

El avistaje de aves es una de las principales atracciones del lugar, donde guías expertos llevan a los visitantes a vivir la experiencia de conocer y disfrutar de las innumerables especies de aves que ahí habitan, como parejas de cauquenes, el carpintero gigante, el chucao, la bandurria y, con suerte, hasta la presencia de algún cóndor.

Otro programa para no desperdiciar son las cabalgata a caballo por la montaña. A orillas del río Minero, los turistas podrán encontrar los caballos de don Lalo Lagos, un clásico del lugar. Esas travesías por la cordillera y los safaris fotográficos son parte del “plan de acción” en Villa Traful.

También se puede practicar la pesca con mosca y devolución, uno de los rituales que es considerado una cultura única del lugar, motivo por el cual los residentes la enseñan hasta de forma gratuita a los turistas. El salmón encerrado es característico de este destino, admirado por los pescadores, cuyas aguas son de las de más alta pureza de toda la Patagonia norte.

Para quienes el buceo es una opción de turismo de aventura, lo pueden practicar en el bosque sumergido, en cuyas claras aguas se puede explorar el fondo de este fenómeno, considerado único en el mundo.

Otras alternativas son el Mirador de Villa Traful; el cerro Negro, donde se pueden hacer caminatas, trekking, safaris fotográficos y actividades de nieve; los arroyos Blanco y Coa-Có; el arroyo de pesca y observatorio de especies salvajes de Cuyín Manzano; las formaciones rocosas del Valle Encantado; el Paso Córdoba, y los ríos Limay y Traful.

Alto Traful

Esta temporada abre sus puertas Alto Traful Lodge & Suites, con 27 habitaciones diseñadas para aprovechar y disfrutar, con altos estándares, la naturaleza. El diseño, el confort y los detalles arquitectónicos, han sido definidos con ese objetivo.

Sus habitaciones conceptuales; el rincón de fuego; el wine bar; el spa y la piscina, generados con conciencia ecológica a partir de la utilización de materiales propios de la zona, entre ellos caña colihue, madera local y pórfidos de Neuquén, y una vista única del bosque y el lago Traful, son algunas de las principales propuestas de Alto Traful.

Desconectados de la vorágine cotidiana; con tiempo para pensar y dejar aflorar las sensaciones, y planificar los días para recorrer algunos de los parajes naturales más espectaculares y menos conocidos del sur. En resumen, unas vacaciones distintas que podrían marcar un antes y un después.