Puerto Madryn: un Vía Crucis submarino

Llega la Semana Santa con sus propuestas de contenido religioso, pero también como una oportunidad para descansar unos días, hacer un “corte” a las actividades habituales y, por qué no, elegir algún destino para hacer turismo.

Las propuestas, tanto locales, como nacionales e internacionales son innumerables. En el ámbito del país, hay una que se destaca por su originalidad: es el Vía Crucis submarino, que se realiza desde 2001 en Puerto Madryn.

Esta ciudad chubutense ofrece amplia playas frente el Atlántico; circuitos en 4x4 por el desierto; gastronomía regional; paseos en kayak por el golfo, y uno de los más famosos escenarios para el avistaje de fauna.

Este año, el 18 de abril, Viernes Santo, se llevará a cabo una nueva edición del Vía Crucis submarino, en el cual la cruz, sus seguidores y el cura Juan Gabriel Arias, recorren las distintas estaciones bajo el agua, a ocho metros de profundidad con iluminación, para que los fieles puedan seguir la procesión en la superficie, ya sea desde la costa o embarcados en kayaks, veleros o lanchas.

Para celebrar la misa, hace unos años se acondicionó una burbuja acrílica recubierta por una estructura de hierro, con un sistema de radio en su interior que permite transmitir en vivo la ceremonia. Esta liturgia finaliza en el muelle Comandante Luis Piedra Buena, donde los fieles aguardan portando velas.

El cura Arias es de la parroquia Natividad de María, de la Ciudad de Buenos Aires, y en 2001 dirigió el primer Vía Crucis Submarino, de Puerto Madryn y del mundo entero, para lo cual previamente hizo el curso de buceo Open Water, como parte de su preparación para esa celebración de Semana Santa.

La convocatoria para participar de las estaciones subacuáticas está abierta a los buzos de todo el país, con los únicos requisitos de que tenga su brevet de buzos y que participen a través de una operadora de Puerto Madryn, de manera que estén contemplados en los procedimientos de seguridad.

Más información sobre cupos e inscripción en aobmadryn@gmail.com

Feria de pescadores

Otra actividad tradicional en Semana Santa es la Feria de Pescadores Artesanales, que comienza el miércoles 16 hasta el sábado 19, en el Club Deportivo Madryn.

En su 11ª edición, volverá a ofrecer una gran variedad de productos frescos y congelados de la pesca artesanal y, además, los asistentes podrán disfrutar de la tradicional paella de apertura y cierre.

La pesca, en Puerto Madryn, es totalmente artesanal y con un manejo sustentable de los recursos de los golfos San José, Nuevo y San Matías. Además, esta actividad sirve de sustento a más de 100 familias, agrupadas desde 1993 en la Asociación de Pescadores Artesanales de Puerto Madryn (Apam).

Otras actividades

Pero no solamente la propuesta de Puerto Madryn se limita a lo mencionado, sino que hay otras actividades para hacer en Semana Santa.

Navegación costera: el catamarán Regina Australe recorre las costas en un paseo de tres horas, en un barco con capacidad para 300 personas y tres cubiertas. Durante la navegación ofrecen servicios de tragos y fast food ($ 320).

Snorkeling con lobos: con marea alta, se sale en lancha rumbo a Punta Loma, donde esperan cientos de lobos marinos. Esta actividad permite un contacto directo con la fauna local sin interferir con sus hábitos naturales (desde $ 900).

Buceo: en arrecifes de roca natural, barcos hundidos y parques artificiales. El servicio incluye atención en tierra, traslados, equipamiento completo, instrucción personalizada y snacks a bordo (desde $ 450).

Pingüinos Punta Tombo: con 200 mil parejas y otras tantas crías, esta colonia de pingüinos es la más grande de Latinoamérica. Los visitantes pueden caminar entre los pingüinos, ver cómo viven, cómo se cortejan y defienden sus nidos (ingreso $ 25).

Paseos 4x4: Ecoaventura en Puerto Madryn es un recorrido en camionetas 4x4 a través de médanos gigantes y senderos de ripio hasta llegar a Cerro Avanzado (desde $ 200).

Kayak: el perfil de Puerto Madryn visto desde el agua. Los prestadores del servicio proveen el equipamiento, como casco y chaleco. La edad recomendada para la práctica de esta actividad es de los 10 a los 50 años (desde $ 115). La excursión de tres horas, hasta Punta Cuevas cuesta $ 480.