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La ciudad de Jesús María se reinventa

A 45 kilómetros al norte de Córdoba capital, la ciudad de Jesús María trasciende fronteras por contar con una de las estancias jesuíticas galardonadas por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad. Se posiciona también como jerarquizado destino de sabores.

Jesús María surgió en torno a la estancia jesuítica del mismo nombre en el siglo XVI y alcanzó el rango de ciudad a partir del trazado de las líneas del ferrocarril del Norte, a fines del siglo XIX, cuando se lotearon los terrenos colindantes a la estación del ferrocarril.

Con un perfil agrícola-ganadero no tardó en ser un próspero polo de desarrollo que logró posicionarse después en el mapa nacional, con el Festival de Doma y Folklore que se encamina a celebrar la 49ª edición a penas despunte 2014.

El anfiteatro José Hernández, donde se desarrolla el encuentro popular que combina el folklore con la jineteada, recientemente abrió sus puertas a los interesados en conocer las coordenadas de la tradición y dispuso un servicio de visitas guiadas de martes a domingos de 10 a 17, para ver desde adentro los entretelones del festival. El paseo atraviesa el Museo del Festival donde se exhiben piezas e imágenes de casi medio siglo que recuerdan la presencia de importantes artistas y campeones de doma.

En una caminata de aproximadamente 30 minutos se recorren las zonas de las gradas, el campo y palenques, vestuarios de jinetes y escenario, con la entretenida información que brinda un guía. Al final del recorrido, en el nuevo Palenque 4 recibe la magnífica escultura de un caballo chúcaro donde, todos desean sacarse una foto para el recuerdo.

Entrada: $ 5.

Informes: teléfonos (03525) 42-1274 y 60-5005.

Perfil gourmet

Asimismo, la imagen de la ciudad se diversifica con nuevas propuestas gastronómicas que complementan la variada colección de lugares con años de trayectoria.

De esta manera, Jesús María está creciendo como destino de sabores, tal como se propuso el Municipio local. Desde famosas parrilladas a restaurantes atendidos por destacados chefs, conforman un abanico de opciones que proponen deleites para el paladar.

La reciente edición del Torneo gastronómico Córdoba Cocina, ratificó que Jesús María es uno de los lugares con mejor gastronomía de Córdoba ya que tres chefs de la zona obtuvieron importantes premios.

En la grilla general Martín Altamirano de La Torgnole Gastronomique logró el tercer puesto; Nicolás López, de El Museo Resto Bar, se llevó el galardón de Mejor Plato Regional, y Martín Paruccia de Inocencio Restó & Vinos, se consagró con el Mejor Plato de Vanguardia de la cocina cordobesa.

Galardón hotelero

Durante la presentación del CreaTur desarrollado en la Universidad Empresarial Siglo 21 (UES21), el Hotel Jesús María recibió el diploma de “Compromiso con la mejora continua” que fue entregado por Enrique Meyer, ministro de Turismo de la Nación y otorgada por la Fundación Premio Nacional a la Calidad, en el marco del Programa Gestión de Excelencia para Empresas de Viajes y Turismo.

Para los jóvenes emprendedores Emilia y Álvaro Mizzau, “la distinción no sólo significa una reconocimiento al esfuerzo del equipo del Hotel Jesús María, sino un orgullo para la ciudad, porque nos jerarquiza como destino receptivo en la Provincia de Córdoba”.

Para llegar a esa instancia los responsables del establecimiento debieron cumplir con un proceso de seis meses de evaluación, diagnóstico y planes de mejoras bajo la tutoría de José Luis Miño, de la Fundación Premio Nacional de la Calidad.

Proyección mundial

Con el fin de mejorar el posicionamiento de Jesús María como destino turístico y aumentar la cantidad de visitantes y permanencia, se realizó una reunión entre la Asociación de Operadores Receptivos de Córdoba, representada por Sergio Navarro y empresarios turísticos hoteleros y gastronómicos de la región, coordinados por Cristian J. Brovelli.

En la oportunidad se acordó integrar a Jesús María y a Colonia Caroya en los productos de Córdoba que promocionará la entidad, integrada por 13 operadores receptivos de Córdoba y otras provincias, a lo largo de un importante calendario de ferias internacionales y nacionales de turismo.

El privilegio de contar con tres estancias jesuíticas en un abarcable perímetro (Colonia Caroya, Santa Catalina y Jesús María); el Camino Real; un circuito cultural gastronómico de primer nivel (salames y vinos en Colonia Caroya y los fogones criollos de Jesús María), sumados a destacados encuentros regionales de trascendencia como el Festival de Doma y Folklore, serán los ejes sobres los cuales se presentará el destino.

A estos importantes atractivos la zona sumó servicios hoteleros y gastronómicos de primer nivel para hacer sustentable su posicionamiento.