Viajes “frikis” a medida, por las locaciones de tus pelis favoritas

¿Quién no se encontró más de una vez soñando con conocer los lugares donde se filmó alguna película? A veces por ser destinos soñados en los que nos encantaría perdernos (y sí, hablamos de todos los sitios que muestran en Emily en París) y muchas otras por ser lugares icónicos que nos gustaría visitar alguna vez (mención obligada al edificio de Friends y el hotel de El Resplandor).

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Eso es exactamente lo que pensó Julieta Yomha, amante de la literatura y el cine que se dedica a armar en Destino Secreto viajes "a medida" de cada fanático, para recorrer de forma autónoma los lugares donde se rodaron sus ficciones preferidas.  "Siempre disfruté de la lectura como de una buena película. Toda mi vida me ha interesado el detrás de escena, lo que no te cuentan cuando ves una peli: curiosidades, anécdotas y los lugares que se usaron", cuenta.

Boleto al Caldero Chorreante, por favor

"A mis nueve años, me regalaron el primer libro de Harry Potter y me enamoré del mundo mágico", relata. Los sitios mostrados en las películas del entrañable mago fueron los primeros que Julieta unió en un tour. Y ahora nos deja sus recomendados para quien planifique un viaje al Reino Unido y quiera internarse en el universo de la magia:

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Primero el Mercado Leadenhall, uno de los más viejos de Londres y que dio lugar al misterioso Callejón Diagon. También la Casa de Australia, lugar que materializó al banco Gringotts. “No puede quedar fuera del itinerario Oxford, la ciudad universitaria más antigua del mundo inglés”, ahí se encuentra la catedral Christ Church, la escalera principal del colegio y otros icónicos lugares de los films se encuentran en su interior.

También recomienda conocer Edimburgo "Aunque allí no se filmó ninguna escena de Harry Potter, es su cuna. J. K. Rowling escribió en esta ciudad varios capítulos de los libros y terminó la saga en una habitación del hotel más lujoso de la ciudad, el Hotel Balmoral", añade.

¡Taxi, siga a esa película!

La guía comenta que los amantes de Sherlock Holmes, Sex and The City y Game of Thrones tienen, también, muchos lugares emblemáticos para conocer por el mundo. Agrega que, según su experiencia, las locaciones más populares son las de Un lugar llamado Notting Hill, Vikingos, Amélie, Home Alone y Rocky, entre otros.

Para los fanáticos de las sagas, para quienes se saben todos los diálogos y para quienes ven una y mil veces la misma película, Julieta deja un último consejo; “Si tenés la suerte de visitar los lugares de rodaje, cambia tu forma de ver las películas. Te sentís parte de esa escena, de esa historia y revivís tu viaje”. Y a no perder la esperanza ¿Quién sabe? Quizás la carta de ingreso a Hogwarts todavía está buscando nuestra dirección.