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Un paraíso con piletas saladas en Creta

La arena blanca – en algunos lugares rosada-  rodeando a las piletas naturales de agua salada en la laguna de Balos es hipnotizante. Sin dudas se trata de una de las playas más fotografiadas de Creta Grecia.

Se trata de un lugar muy visitado por turistas así que a las personas que no les gustan los lugares con mucha gente es recomendable que no la visiten entre junio y agosto. El resto del año las playa son menos concurridas aunque lo mejor es siempre llegar al amanecer para poder disfrutar de ese paisaje en tranquilidad sin nada de gente ni barcos.

El lugar es ideal para realizar snorkeling y descubrir la vida marina de la zona. Tanto en la tierra como bajo el agua se pueden encontrar especies exóticas que no se ven en otros lugares. Cabe destacar que todo este espacio es una zona protegida por lo que no se puede molestar a los animales ni dañar el espacio.

¿Cómo llegar?

La manera más sencilla de llegar a la laguna de Balos es tomar el ferry de la mañana de Kissamos. Durante el camino se pueden apreciar costas de Gramvousa y las marcas de su levantamiento después de un fuerte terremoto. Además, el ferry hace una parada en playa de Imeri Gramvousa en donde las personas se pueden dar una chapuzón para después continuar el viaje.