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¡Qué frío! hay un hotel de hielo en Laponia

En Finlandia, cerca de donde la leyenda cuenta que está la casa de Papá Noel, un hotel se construye cada invierno con bloques de hielo y el trabajo de artistas cuidadosamente seleccionados para diseñarlo.

El Icehotel, localizado a las orillas del río Torne en el pueblito sueco de Jukkarjärvi, se fundó en 1989 como una propuesta de ruptura dentro del turismo de invierno de la región y desde entonces atrae a miles de turistas que pasan el día o se quedan a dormir en sus habitaciones de estética iglú, con -8 grados bajo cero, mantas de piel de reno y bolsas de dormir con aguas termales. Cada uno de los baños tiene sauna y duchas calientes y por la mañana, el servicio incluye un jugo caliente de arándanos rojos para activar la circulación.

Todos los años el hotel tiene una forma y un aspecto diferente, nacido de la creatividad de los escultores y arquitectos que participan durante meses del proyecto, a partir de ladrillos de hielo que se extraen del río.

Además del hotel, donde se colocan también esculturas heladas, el atractivo del lugar está en el bar de hielo Absolut Icebar, donde se puede tomar champaña y tragos helados durante todo el año.

Los que se alojaron allí dicen que la experiencia es surrealista, que el frío es lo de menos y que vale la pena cada minuto de congelamiento que pueda acontecer. El servicio ahora funciona durante todo el año, pero para alojarse hay que hacer la reserva un año antes porque los pedidos se acumulan de a centenares. Una noche allí cuesta, como mínimo, u 250.