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Por el clima, los cerezos en Japón florecieron en pleno otoño

El fenómeno se produce seis meses antes de lo normal. Se debe a los daños causados por los tifones en el verano y a las altas temperaturas que hubo en la zona.

Debido al clima irregular que se vivió en la última temporada, los emblemáticos cerezos de Japón florecieron seis meses antes de lo normal.

Muchos turistas de todo el mundo suelen viajar a este país para la época de la primavera, cuando brotan las flores de estos árboles. Sin embargo, quienes se encuentren en la zona o estén a punto de viajar, aunque sea pleno otoño, podrán ver en este momento más de 350 cerezos de Yoshino llenos de color.

Los meteorólogos aseguran que esta floración temprana se debe a los daños causados por los tifones que afectaron las costas el verano y, posteriormente, las altas temperaturas, más elevadas de lo habitual.

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Sin hojas

Los cerezos de Yoshino desarrollan sus brotes durante el verano, pero una hormona, liberada por las hojas de los árboles, inhibe su crecimiento hasta la primavera. Debido a los fuertes vientos y el agua salada de los tifones que afectaron al país, las hojas se cayeron de los árboles, cortando el suministro de hormonas.

Si bien algunos cerezos pueden florecer en enero, la mayoría no lo hace hasta marzo. Sin embargo, este año probablemente será muy diferente, por lo que los turistas que pensaban viajar en la próxima primavera japonesa para ver estos árboles deberán estar alerta.

Símbolo de nuevos comienzos

La corta vida de las flores del cerezo se nutre de una apreciación prolongada de la belleza de la fugaz naturaleza de la vida, tal como se refleja en el patrimonio cultural de la nación, desde las ceremonias del té hasta la cerámica wabi sabi. Las flores también, literalmente, simbolizan nuevos comienzos, con el 1° de abril como el primer día del año financiero y académico en Japón.

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Por lo tanto, no se trata solamente de hermosas flores, sino de la encarnación de las creencias filosóficas y culturales más arraigadas de Japón.