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Opciones de cobertura

Se pueden contratar seguros, asistencias con empresas especializadas o gestionarlos a través de tarjetas de crédito premium y prepagas.

Elegimos el destino, la duración, la aerolínea, los hoteles… y algunos turistas, la cobertura para estar tranquilos ante un inconveniente. Lo cierto es que al momento de planificar el viaje, el seguro o la asistencia no siempre figuran como una prioridad y su omisión puede convertirse en un dolor de cabeza.

De acuerdo con los últimos datos del mercado, entre el 40% y 45% de los argentinos que viaja al exterior omite la contratación de una protección. Y además, suele confundir seguro de viaje con asistencia al viajero.

Lo primero que hay que saber es que el seguro reintegra los gastos generados, ya sea por enfermedad o pérdida de objetos en función de lo contratado; mientras que la asistencia ofrece coordinación integral en el momento del inconveniente. Es decir que el seguro de viaje protege las pertenencias y, ante un inconveniente, se reembolsan los gastos ocasionados, mientras que a través de la asistencia se brinda la prestación en el momento del percance.

Más que un botiquín

Llevar paracetamol y pastillas para el hígado es necesario, pero no alcanza. La asistencia no sólo genera tranquilidad sino que es un resguardo, ya que ante un problema sólo se tiene que llamar a un número para informar lo sucedido y, a partir de ahí, se activa la prestación. Hay distintas opciones, pero en general están contempladas enfermedades, accidentes, internaciones, traslados sanitarios, medicamentos, gastos por hotel y convalecencia, entre otros, hasta la repatriación sanitaria.

También alcanza al equipaje, ya sea demora o extravío, abonando una indemnización y/o compensación complementaria por pérdida permanente y cobertura de pagos necesarios por la demora. Asimismo, cuenta con asistencia legal ante eventuales accidentes de tránsito, asistencia en localización de equipaje, extravío de documentos y acompañamiento de menores, entre otros.

"El canal de venta de la asistencia es a través de las agencias de viaje o de la web, de manera online. El cliente cotiza, emite e incluso puede pagar la cobertura desde cualquier dispositivo", explicó Alejandro Calvani, gerente comercial de Travel Ace; al tiempo que comentó que se ofrecen cuatro o cinco productos para que el cliente pueda comparar y elegir el que más se ajusta a sus necesidades. Además, se puede bajar la app de Travel Ace para tener en el celular no sólo los datos para activar la asistencia si fuera necesario sino información sobre el clima, conversión de monedas y detalles, entre otros beneficios.

Tarjetas y prepagas

Los titulares de tarjetas de crédito premium de los bancos tienen la cobertura de asistencia sin cargo. Generalmente, incluye cobertura médica, odontológica y legal; es decir, lo básico para estar resguardado. Según la entidad, la cobertura alcanza al titular del plástico y a su grupo familiar, con la opción de ampliar el paquete básico abonando un extra, ya sea para incrementar el tope de la prestación por accidente o enfermedad, sumar un seguro por pérdida de equipaje o extender la vigencia de la cobertura.

Por su parte, las prepagas cuentan con cobertura en el exterior, que varía en función del plan. Al igual que las tarjetas, los montos de cobertura son reducidos. En ese sentido, hay que tener en cuenta que para ingresar a alguno de los países europeos miembros del Acuerdo Schengen se exige una cobertura médica superior a 30 mil euros. Y si el destino es Estados Unidos, lo recomendable es contar con una cobertura superior a los 15 mil dólares.

Costos

-Asistencia al viajero: si bien se tienen en cuenta la edad de las personas, el destino y la duración del viaje, una cobertura de un mes a Europa para dos personas ronda los siete mil pesos.

-Seguro de viaje: una coberturabásica de enfermedad, accidente y equipaje para dos personas un mes a Europa se consigue desde 1.800 pesos.

Claves

Al momento de elegir la asistencia, es importante diferenciar si el viaje es por placer, de negocios o deportivo, debido a que existen distintos riesgos así como el estado de salud, la composición y la edad del grupo familiar. Los expertos recomiendan comparar precios, condiciones de servicio y analizar las promociones.