Modo crucero por Italia

Crónica de un recorrido en un crucero de lujo, visitando varios puertos.

El recorrido duró 10 días “intensos” a bordo del Azamara Quest que partió del puerto de Chioggia, distante a 50 kilómetros de la ciudad de Venecia, con un ambicioso y tentador itinerario que con los días fue fluyendo casi sin sentirlo. La comodidad del crucero, sumado a la practicidad de manipular una sola vez el equipaje en el barco, la oferta gastronómica, entretenimientos, piscina, spa y las actividades propuestas tenían todas las chances de ser un planazo. El Azamara Quest es algo similar a un “hotel boutique” sobre el mar, por las comodidades del Camarote con balcón, los amenities y, principalmente, el servicio que brindan los asistentes de cabina, que desde el minuto uno están a disposición para orientarte sobre el funcionamiento y dinámica de la navegación. Otro destacado es el placer de bajar en cada recalada solamente con una riñonera y disfrutar los distintos recorridos particulares que propone cada lugar, sean excursiones programadas o bien salidas libres a la medida de cada uno.

En todos los puertos hay opciones que recorren la historia del lugar, y también excursiones programadas. (Gentileza: Oscar Alvarez)

El itinerario comenzó por el Mar Adriático finalizando en las costas del Mar Mediterráneo, serpenteando a lo largo de su recorrido la figura de Italia y descubriendo en cada puerto una ciudad turística; así se fueron sucediendo los puertos: Chioggia, Ravena, Kotor (Montenegro), Dubrovnik (Croacia), ya ingresando al Mar Mediterráneo, fue: Siracusa, Sorrento, Napoli y, llegada final, a Civitavecchia (cerca de Roma).

El Azamara Quest es un barco de lujo con dimensiones más pequeñas que sólo transporta 700 pasajeros lo que facilita el ascenso y descenso en las escalas, y la posibilidad de entrar en los distintos puertos y desembarcar directamente en ellos, es uno de los diferenciales que lo destaca y por ello elegido por aquellos turistas que ponen énfasis en conocer varios destinos en cada navegación. Otra de las ventajas es el horario de arribo a las distintas ciudades: por la mañana temprano y la salida de puerto es casi entrada la noche, pudiendo disfrutar de una larga jornada en cada destino.

Actividades en puerto

En Ravena nuestro recorrido elegido fue ir al Museo Ferrari, distante a una hora aproximadamente del Puerto, es un clásico de la ciudad de Maranello que desarrolla a lo largo de sus pisos toda la historia de su creador y de la marca. Ejemplares que hicieron historia, biografía de los pilotos más destacados y un apartado para simuladores y tienda de recuerdos. Muy recomendado para fierreros y amantes de la Fórmula 1.

En Dubrovnik realizamos un tour por la ciudad amurallada y por la tarde una visita a bodegas pintorescas del valle de Konavle en un tren de carretera. (Gentileza: Oscar Alvarez)

En Dubrovnik (Croacia) realizamos un tour por la ciudad amurallada y por la tarde una visita a bodegas pintorescas del valle de Konavle en un tren de carretera, visitamos viñedos rústicos en su mayoría emprendimientos familiares que también abren sus puertas mostrando artesanías locales, aceite de oliva y vinos. En todos los puertos hay opciones que recorren la historia del lugar, y también excursiones programadas desde el Servicio de atención al huésped de Azamara ofrecen la posibilidad de reservar desde antes de embarcar en el viaje.

Az Amazing Day

Es una actividad que lleva 10 años celebrándose en la marca, y consiste en una intervención temática cultural en una de las ciudades dentro del itinerario; en nuestro caso fue la emblemática Siracusa en Sicilia.

Al descender en puerto se pudo ver que la señalización de Azamara en donde las puestas temáticas nos fueron sorprendiendo. (Gentileza: Silvia Alegre)

Al descender en puerto se pudo ver que la señalización de Azamara nos fue guiando hacia los diferentes puntos en donde las puestas temáticas nos fueron sorprendiendo, desde una interpretación lírica en la plaza Minerva junto a la Catedral de Siracusa, luego en el Teatro Municipal la interpretación de Caballería Rusticana en piano y violín, culminando en el Palacio San Zósimo, donde un conjunto musical interpretó piezas clásicas de la cultura italiana como la de la banda de sonido de la película El Padrino, o bien las interpretadas por Pavarotti o José Carreras; este paso fue acompañado con platos típicos sicilianos y vinos italianos. Una celebración dedicada a los pasajeros del Azamara Quest en Siracusa.

Gastronomía

Los restaurantes ofrecen menús variados, temáticos de la cocina internacional y tradicionales. Otra posibilidad es optar por restaurantes que tienen categoría premium (Acqualine) con una carta francesa, en el que hay que reservar la mesa (con cargo extra). Además, hay propuestas de noches temáticas, como la Noche italiana y la Noche de blanco.

Una barra que ofrece cocktails o bien un punto en donde poder degustar del mejor café son los espacios destinados al disfrute y la socialización entre los pasajeros.

Increíble la experiencia vivida en la travesía de once días contemplando la silueta del país desde el Mar y vivenciando en los puertos el espíritu italiano de su gente y sus costumbres, sin dudas volvería a navegarlo.