Impactante: así es la “cascada de fuego” de Yosemite

Los afortunados que visiten el Parque Nacional Yosemite, localizado en las montañas de Sierra Nevada, California (Estados Unidos), tendrán la posibilidad de observar una "cascada de fuego" que sólo puede apreciarse durante unos pocos días al año.

Hasta finales de febrero o principios de marzo, la cascada Horsetail (en español, “cola de caballo”) protagoniza un espectáculo increíble: cuando el sol del atardecer la ilumina, adquiere un color anaranjado que la vuelve muy similar a la lava. Quienes han sido testigos de este fenómeno dicen que la montaña parece expulsar fuego.

Un dato no menor es que, aunque se visite el parque durante este momento del año, no hay garantías de que se pueda apreciar el espectáculo. ¿De qué depende? Por un lado, de que haya habido lluvias abundantes; por otro, de que el cielo esté despejado así el sol puede iluminar el agua y, por último, de que esos días la temperatura sea un poco más elevada que lo habitual: si hace mucho frío, el agua permanecerá congelada y no fluirá.

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Finalmente, hay que estar 100% atentos, ya que el show no dura más que 10 minutos.

Descubierta por un fotógrafo

Durante una tarde de febrero de 1973, el fotógrafo Galen Rowell vio las luces del sol poniente reflejarse en la cascada Horsetail. Al día siguiente, fue a recorrer el valle con un guardaparques, que nunca antes había sido testigo de esa maravilla.

Desde entonces, todos los años, muchísimas personas visitan el parque para dejarse asombrar por la “cascada de fuego”.

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Las coordenadas

El punto más conveniente, y más popular, para admirar la cascada Horsetail es el área de picnic de El Capitán, que se encuentra a aproximadamente 30 kilómetros de Yosemite Lodge at the Falls, en Northside Drive.

Los visitantes deben estar preparados para caminar al menos 1,5 kilómetros desde el lugar de estacionamiento hasta el mirador. Es importante ir bien equipado: con ropa de abrigo, botas y un faro o linterna.