En Jordania te podés hospedar en un auto en medio del desierto

En Al Jaya (Jordania), Mohammed Al-Malahim convirtió un Escarabajo Volkswagen viejo y desmejorado en un hotel. Y si bien lo considera como “el alojamiento más chico del mundo”, vale aclarar que no ostenta ese récord según Guinness.

Remodelado para ser una cómoda habitación para dos personas, el auto es bastante vistoso y está cubierto por mantas de colores hechas a mano. En el interior tiene una cama de dos plazas y las “paredes” están decoradas con fotografías de atracciones locales. Para desayunar o almorzar, la consigna es dirigirse a una cueva cercana donde el propietario instaló una especie de “recepción”. Allí se encuentra él junto con sus hijas y esposa.

En el último tiempo, este pequeño hotel se ha vuelto muy famoso. Varios turistas prefieren pasar una noche low cost antes que hospedarse en grandes resorts de lujo. Eso sí: la propuesta de Mohammed Al-Malahim es que sus huéspedes se sientan como en un hotel de 5 estrellas.

¿El precio? Una noche dentro de este diminuto auto cuesta unos 75 dólares, lo que equivaldría a unos 2.925 pesos argentinos. Dentro de ese valor se contempla tanto el servicio a la habitación como las comidas.

Un sueño

Ubicado cerca del castillo de Shawbak, el hotel abrió sus puertas en 2011. Según comenta su propietario, su objetivo era ayudar a la economía del lugar y fomentar el turismo para que más viajeros llegaran a conocer los paisajes de su pueblo. Para llevar adelante el proyecto, Mohammed Al-Malahim contó con la ayuda de su hija, quien se encargó de remodelar el vehículo.

En un futuro, su sueño es añadir más habitaciones al pequeño resort casero. La idea es transformar y anexar más autos Volkswagen para sumar unas 10 o 15 habitaciones con el mismo estilo.

El del récord

Actualmente, el título del hotel más pequeño del mundo está en manos del Hotel Eh’häusl, ubicado en la ciudad de Amberg, en Alemania. Posee una habitación de unos 53 metros cuadrados.