Difícil elegir entre las encantadoras playas de Portugal

Arena suave, mucho sol, acantilados, aguas transparentes o de colores profundos y encantadores, olas gigantes o sectores tranquilos. Portugal, como destino de playa, crecía sostenidamente hasta la crisis del Covid-19.

Pero el contacto con la naturaleza, su propuesta amplia y variada de playas (cuentan más de 350 playas, 214 clasificadas como playas accesibles), convierte al país en un lugar que muchos apuntan para la salida de la crisis.

Acá, destacamos algunas de las más sorprendentes.

Porto Santo

Perfecta para descansar y relajarse. Fue elegida por los amantes del sol, mar y arena como uno de los secretos mejor guardados de Europa, y de las más bonitas del continente. Son nueve kilómetros, con arena fina y dorada que dicen que tiene cualidades terapéuticas.

Praia dos Galapinhos 

Está dentro del Parque Natural de la Arrábida, que incluye una zona costera de aguas cristalinas y pequeñas bahías. Es una playa rodeada de naturaleza virgen, lo que la hace tan especial que fue elegida la mejor playa europea en 2017.

Berlengas

Su acceso está controlado en los meses de mayor turismo, por eso siempre escasean las multitudes. Allí radica uno de los encantos de esta área protegida del Archipiélago de Berlengas, a 10 kilómetros de Peniche.

North Beach

Hace una década, la playa se hizo famosa por tener la ola más grande del mundo, que fue surfeada por Garrett McNamara. Con 30 metros de altura, era un récord que solo podían desafiar los surfistas más atrevidos.

Ericeira

Ribeira de Ilhas, Coxos y Empa son elegidas por los amantes de la práctica del surf. Tiene ocho kilómetros de costa, calificados como la primera Reserva Europea de Surf y la segunda del mundo, por la organización “Save the Waves Coalition”.

Amado + Arrifana

Otros lugares ideales para surfear en Portugal, elegidos por todos los surfistas europeos. Especialmente en Amado Beach se realizan competencias internacionales, mientras que Arrifana es muy popular entre las escuelas de esta práctica deportiva.

Salema Beach, Vila do Bispo

Por algunos medios especializados, fue considerada una de las mejores playas para disfrutar en familia. Está sobre un pueblo de pescadores, tiene aguas tranquilas y cristalinas, y arena para dar largos paseos por la orilla del mar.

Camilo + Benagil

Entre acantilados escarpados, son el sello distintivo de Algarve. Hay quienes la incluyen en el listado para ver “al menos una vez en la vida".  Desde los barcos, se pueden visitar las cuevas secretas a lo largo de la costa.

Dona Ana

El agua turquesa y los recovecos naturales hicieron que esta playa fuera considerada una de las 50 más bellas del mundo por la revista Condé Nast Traveller. Es una de las playas más fotografiadas del Algarve.

Marinha

Un pedacito de naturaleza virgen, esta es una playa muy pintoresca enmarcada por un acantilado que ha sido esculpido por el viento y el mar. Se considera una de las 100 mejores playas del mundo.