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Las obras y la historia de Salvador Dalí en su mayoría se encuentran expuestas en diversos museos que el pintor catalán creó y dejó como legado a la humanidad.
Salvador Dalí, a lo largo de una vida de gran producción artística, también creó distintos museos.
Uno de ellos es el Teatro Museo Dalí, en la ciudad de Figueres, provincia de Girona, que fue construido sobre las ruinas del viejo Teatro Municipal, destruido en 1939 al finalizar la Guerra Civil española.
Fue el propio Dalí quien dirigió la obra, que se inauguró el 28 de octubre de 1974 y se convirtió en el segundo museo más visitado, después del Museo del Prado.
De acuerdo con los datos proporcionados por la Fundación Gala-Salvador Dalí, en 2011 fue visitado por 916.560 turistas que significó un aumento del 3,99 por ciento con respecto al año anterior.
Además de sus obras, allí se encuentra sepultado el pintor en una cripta bajo el nivel del edificio, desde el 25 de enero de 1989, dos días después de haber fallecido.
La entrada a este museo cuesta 12 euros por persona, los niños hasta 8 años no pagan y para grupos de mas de 25 personas, el costo es de 8 euros cada una. En los meses de verano (julio y agosto) se observan largas filas de visitantes que esperan sus turnos para ingresar.
Al lado de este museo, se encuentra el Espacio Dalí-Joyas, en el que se exhiben 37 joyas de oro y piedras preciosas y los 27 dibujos y pinturas para los diseños que el artista realizó entre 1941 y 1970.
El año pasado lo visitaron 281.049 turistas que significó un aumento del 18,68 por ciento. En este caso las entradas cuestan 7 euros y para grupos, 4 euros por persona.
Castillo de Pubol. Otro de los museos de Dalí es el Castillo Gala-Dalí, de Pubol, pequeño pueblo ubicado en la comarca de Baix Emporda, también en la provincia de Girona.
El pintor lo adquirió en 1969 como regalo a su esposa Elena Diakonova, conocida mundialmente como Gala.
El castillo tiene su origen en el siglo XI, consta de tres plantas articuladas con un patio central y es de estilo austero y sobrio, donde se destaca la antigua cocina transformada en el baño de Gala.
El museo fue abierto al público en 1996 y el año pasado lo visitaron 125.868 personas, es decir un 18,52 por ciento más que en 2010.
La entrada cuesta 8 euros y para grupos es de 5,50 euros.
Casa en Portlligat. Por último, la Casa de Portlligat, ubicada en un pequeño pueblo de pescadores, muy cerca de Cadaqués, fue la vivienda permanente de Dalí desde 1930. Convertida en un verdadero laberinto, ya que comenzó con una sola habitación y a través de los años el pintor le fue adicionando las casas vecinas a medida que las compraba.
En ese lugar paradisíaco, trabajó y vivió hasta la muerte de Gala.
La visita guiada cuesta 11 euros y es muy interesante recorrer los distintos sectores interiores y el bello parque, con vistas al Mediterráneo, donde hay una pequeña piscina.
En 2011, llegaron a la casa 108.271 visitantes, un 2.04 por ciento más que en el período anterior.
La suma total de visitas entre todos los museos arrojó 1.431.748 turistas, lo que significó un 7.61 por ciento más que el año precedente.
