Ciudad de virreyes en el siglo 21

Lima se posicionó como capital gastronómica e invita a paladear la sazón limeña. Un cuidado centro histórico y sofisticadas tiendas de diseño y arte trazan el perfil cosmopolita que le da vida y que se extiende a jerarquizados barrios.

Lima está ubicada a 2.514 kilómetros que se cubren en poco más de tres horas y media, de acuerdo al clima y las rutas aéreas. La capital peruana pasó de ser un lugar de paso para ir a Machu Picchu, a una de los destinos ideales para visitar por los argentinos. A continuación cinco imperdibles para disfrutar de la fascinante “Ciudad de los Virreyes”.

Una de los atributos que tienta a los argentinos que visitan Lima es su reconocida gastronomía, que en los últimos años se difundió en el mundo entero (en Córdoba hay varios exponentes de esa sabrosa comida). Ingredientes, creatividad y pintoresquismo nacional están presentes en sus platos.

Un buen lugar para iniciar el periplo de las bondades culinarias es la avenida La Mar, en el barrio de Miraflores. En esa arteria se encuentran conocidos restaurantes, como el ya clásico La Mar, propiedad del famoso chef Gastón Acurio, y el difundido Pescados Capitales, célebre por su pisco sour y frescos cebiches. En el mismo barrio está Central, de Virgilio Martínez considerado uno de los mejores restaurantes de Lima y probablemente de Latinoamérica, según los críticos gastronómicos.

La cocina nikkei, que combina los ingredientes de la gastronomía peruana con la japonesa, también conquista los paladares de los turistas. Uno de los mejores representantes es el restaurante Maido, de Mitsuharu Tsumura, conocido como “Micha”, con sus finas creaciones como el arroz con pato al wok, el sushi de conchas con maca, el sushi de cecina, el tiradito y ceviche Nikkei, el nigiri a lo pobre o el asado de tira cocido por 50 horas.

En Lima también tiene gran éxito la llamada cocina chifa, fusión de la comida china con insumos peruanos, que se puede paladear en el restaurante Royal, en el barrio de San Isidro. Ahí el plato estrella es el pato asado pequinés.

De compras. Lima es una ciudad cosmopolita, plagada de barrios trendy y sofisticadas tiendas de diseño. Como por ejemplo, San Isidro, centro financiero y uno de los barrios más modernos, donde se encuentran algunos de los mejores comercios de la ciudad, desde lujosas joyerías y boutiques, hasta ateliers de destacados diseñadores peruanos; principalmente sobre la avenida Conquistadores. En el barrio Miraflores también hay muy buenas tiendas y centros comerciales, pero el sector que más destaca hoy es Barranco con tiendas como Dédalo o Las Pallas, ambas especializadas en artesanía contemporánea.

De moda, en este barrio las casonas antiguas lucen bien restauradas para albergar los bares más animados de la ciudad, galerías de arte contemporáneo y tiendas de diseño joven. Un buen lugar para conocer el arte limeño actual es la galería Mate, del destacado fotógrafo Mario Testino o la galería Lucía de la Puente, en el imperdible Paseo Sáenz Peña.

Larcomar y Jockey Plaza son también algunas alternativas para los amantes de las compras. En cuanto a artesanía, el Mercado Indio, ubicado en avenida Petit Thouars (Miraflores), es el más grande en todo el país.

Vida nocturna. El corazón de la vida nocturna se centra en Miraflores, San Isidro y Barranco. Los bares y discotecas de música en directo del Parque Kennedy y los locales (Aura y Gótica) del centro comercial Larcomar, son los que dominan la vida nocturna de Miraflores. San Isidro, en tanto, ofrece un ambiente más sofisticado.

Para descubrir la noche limeña, es un deber caminar al atardecer por el Puente de los Suspiros, en Barranco. Ahí se encontrará alguno de los mejores bares de la ciudad, como Santos o Picas, en los que además de ofrecer diversas versiones del clásico pisco sour, también preparan chilcanos -uno de los tragos más populares de Perú, que consiste en pisco, ginger ale y limón, y distintos cocteles con el pisco como protagonista.

Un lugar tradicional incluso para las nuevas generaciones es el Queirolo, en el distrito de Pueblo Libre, donde se venden vinos y piscos. También están de moda las cervecerías: Barranco Beer Company y Bar Cañas y Tapas.

Milenaria. El centro histórico de Lima está muy bien conservado y fue declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad.

Desde su fundación en 1535, Lima fue la capital del Virreinato del Perú y eso queda demostrado en sus opulentas construcciones e iglesias. La más famosa es la Basílica de San Francisco, que además de poseer un museo y un impresionante convento, en su subterráneo esconde las famosas catacumbas con osamentas que datan de hasta principios del siglo 19.

Para retroceder aún más en el tiempo y conocer en profundidad el pasado de Lima y el resto del país, una muy buena opción es visitar el Museo Larco, que muestra la historia del Perú precolombino y una de las más finas colecciones de oro y plata del mundo. Pero también hay que aprovechar para conocer alguno de los más de 100 sitios arqueológicos distribuidos por toda Lima, como la Huaca Pucllana en Miraflores o Huallamarca en pleno centro financiero limeño.

Neoclásica. Lima se fundó en 1535 pero tiene una larga historia precolombina y cuenta no sólo con varios complejos arqueológicos y edificaciones coloniales, sino también con centros de esparcimiento, cultura y diversión modernos, como el Circuito Mágico del Agua, en el Parque de la Reserva ubicado en el centro de la ciudad. Inaugurado en julio de 2007, el Circuito Mágico del Agua, ostenta el récord Guinness por ser el complejo de fuentes más grande del mundo en un parque público. Cuenta con 13 fuentes, una de las cuales tiene un chorro que alcanza los 80 metros de altura, que parecen ejecutar una sincronizada danza de música, luz y color. El espectáculo que protagoniza el agua al dibujar diversas formas que se elevan en el aire, hacen de este lugar uno de los preferidos de los visitantes.

El Parque de la Reserva amerita una recorrida por sus edificios neoclásicos, construidos en 1926 y diseñados por el arquitecto francés Claude Sahut.

Finalmente, no hay que dejar de ir a la exhibición de David LaChapelle, en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC), ubicado en el barrio de Barranco, donde se reúne lo mejor de su obra. El fotógrafo más famoso de la cultura pop presenta en Lima, hasta el 12 de abril, una retrospectiva conformada por sus mejores imágenes de los últimos 30 años. LaChapelle fotografió a Madonna, Eminem, Pamela Anderson, Uma Thurman, Elizabeth Taylor, Leonardo Di Caprio, Muhammad Ali, Hillary Clinton, Katy Perry y Lady Gaga, entre otros y su trabajo ejerce influencia en numerosos artistas y fotógrafos de todo el mundo.