4 saludos sin contacto físico de culturas del mundo para poner en práctica

Los argentinos, en general, somos cariñosos: abrazamos fuerte, nos damos palmadas y besos intensos, andamos de la mano, colgados del brazo o del hombro de una amiga. Nos encanta estar cerca. En el marco de distanciamiento social que estamos atravesando, la distancia personal se ha vuelto un arma de guerra poderosa. Con el sólo hecho de mantenernos alejados estamos haciendo un enorme aporte para disminuir la propagación del coronavirus. La buena noticia es que en el mundo existen diversas culturas en las que en el saludo no interviene el contacto físico. Te presentamos estas cuatro formas de saludar, con respeto y consideración, para que puedas ponerlas en práctica de balcón a balcón:

1. El wai 

Inclinar la cabeza levemente hacia abajo mientras sostenemos las manos juntas a la altura del pecho. En Tailandia el wai no sólo significa que estamos abiertos al otro, sino que indica que venimos en son de paz. Este gesto que tiene influencia del budismo y del hinduismo, es utilizado para rezar en la práctica espiritual, pero también para el saludo, para pedir disculpas y evitar confrontamientos. Es una excelente alternativa para decir "hola" y evitar el contacto físico.

2. El Saalam 

Aunque en la cultura islámica el abrazo, el apretón de manos y el beso también formen parte de sus gestos de saludos, este saludo sin conctacto físico es uno de los más usuales.  As-salamu alaikum significa que la paz esté contigo y se pronuncia al tiempo que llevamos la mano derecha al corazón. Un saludo sagrado que fomenta la unidad y el amor entre la comunidad muslumana y que forma parte de la práctica espiritual. Para la religión islámica tocarse el corazón es algo sagrado porque allí reside el alma. Al saludar de esta forma, manteniendo la distancia, estamos preservando nuestra salud y la de los otros.

3. El Namasté 

Un saludo que tiene miles de años de antigüedad en la India; una señal de respeto y gratitud que se logra juntando las palmas de las manos llevándolas hacia arriba con una inclinación ligera de cabeza. Mediante este gesto que expresa también humildad, estamos conservando y cuidando la energía que poseemos en vez de absorber la de la otra persona. Si alguna vez practicaste yoga, seguro ya la has utilizado al finalizar la clase. Otra forma de cuidarnos entre todos y mantener la distancia.

4. La reverencia

En Japón este saludo comenzó siendo un gesto exclusivo de la nobleza: la persona que se inclinaba lo hacía para parecer más pequeña y era utilizada para marcar la diferencia de clases. Actualmente, no tiene el mismo significado, es el gesto más común en Japón y constituye una forma de saludo. Inclinar el cuerpo y la cabeza hacia abajo unos 15 grados, con los brazos al lado del cuerpo, es un indicador de respeto hacia el otro y una perfecta forma de saludar en tiempos de distancianciamiento.

Otras culturas del mundo nos permiten mantener el saludo, mostrando agradecimiento, siendo humildes y respetuosos. Mantener la distancia es posible y también es un deber y una responsabilidad. Eso no quita que podamos ser creativos e inspirarnos en otras formas, en otras prácticas. ¿Ya aplicas algunos de estos saludos sin contacto físico en tu día a día?