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Turismo en la nueva normalidad: qué dicen los influencers cordobeses

Candelaria Sturniolo escribe sobre turismo y accesibilidad. (instagram: @ can_world)
Candelaria Sturniolo escribe sobre turismo y accesibilidad. (instagram: @ can_world)

Los influencers de viajes de Córdoba hablan sobre sus experiencias y dan consejos para las primeras aventuras pospandemia.

No sólo comparten fotos espectaculares de los destinos que visitan, sino que también suman información de calidad en cada posteo: indicaciones para llegar a “ese” lugar soñado, datos sobre qué tan accesible es un destino o el paso a paso para gestionar un trámite de circulación.

En estos momentos de reapertura gradual, Cande (@can_world), Gonzalo (@gongranja), Tatan (@ratatrip) y Agus (@pasaje.en.mano) nos muestran su perspectiva y nos dejan algunos consejos.

Postales cercanas

“Creo que es un buen momento para apoyar al turismo nacional”, dice Cande. En eso todos concuerdan: el primer viaje que hagan será a un destino próximo. “Cerca de casa y con nuestros más allegados”, comenta Agus. Lo mismo opina Gonzalo, que espera pronto retomar su proyecto de abarcar desde La Quiaca hasta Ushuaia, en un libro sobre la legendaria Ruta 40.

Para quienes estén ansiosos por emprender un viaje, Tatan recomienda “recorrer todos los días lugares cercanos, aunque sea ir al trabajo por un camino diferente o explorar un lugar nuevo del barrio o la ciudad”. Y agrega: “Nos vino bien este tiempo para procesar lo que ya vivimos; disfrutamos el hoy sin ansiedad de viajar. Nos enseñó que frenar no es malo y que cada momento tiene algo bueno”.

Gonzalo también hace hincapié en el placer del día al día y sugiere “el eterno ejercicio de, más allá del destino, buscar siempre disfrutar el recorrido”.

Seguridad y accesibilidad

“Creo que muchos de estos momentos bisagra traen avances, o al menos así nos lo han demostrado otros hechos significativos a nivel mundial. El protocolo sanitario se va a ver reforzado, y va avanzar a pasos gigantes tal y como lo hizo la seguridad en los aeropuertos luego del 9/11”, opina Gonzalo.

Si bien la nueva tecnología soluciona muchos problemas, Cande resalta la importancia de que estos cambios se realicen teniendo en cuenta las necesidades de todos. “Está bueno que se adecuen los protocolos para las personas con discapacidades. Necesitamos más puntos de apoyo, tener contacto con superficies y otras personas. En algunos casos, la autogestión sin contacto humano es, para nosotros, un retroceso, porque muchas veces necesitamos manifestar lo que necesitamos, o pedir ayuda para solucionar algo”.

Chequear antes

Para Agus, “los viajes a largo plazo serán eligiendo destinos que nos den confianza y cuidándonos mucho más que siempre”. “Vamos a elegir alojamientos que en sus fotos publicitarias nos vendan limpieza. Alcohol en gel y barbijo van a ser los indispensables en la valija”, agrega.

También en el caso de Tatan la limpieza será crucial a la hora de decidir un destino, y por una razón muy especial: “Ahora tenemos una bebé, y obviamente eso nos limita. Ya no somos solamente nosotros dos, que tenemos las defensas altas, sino que debemos fijarnos en su seguridad. Es un tiempo de adaptación”.

Añoranza y aprendizajes

Muchas son las cuestiones que los viajeros van a extrañar de la "vieja normalidad", pero si pudieran resumir algunas serían estas: para Gonzalo “los simples gestos, como compartir un mate o un abrazo sin tanto preguntar”.

En el caso de Agus, los abrazos y despedidas en el aeropuerto. “Hoy ya sólo entran pasajeros”, explica. Y agrega: “También voy a extrañar el hablar con extraños en los destinos, no creo que acercarse a desconocidos sea bien visto ahora”.

Cande va a extrañar los espacios compartidos, “como los desayunos de los hoteles, que ya cambiaron de modalidad y no son más de estilo buffet”. Por su parte, Tatan destaca la añoranza de los tiempos más simples: “Seguramente extrañemos la tranquilidad con la que nos movíamos antes”.

De limones y limonadas

Tatan, Gonzalo, Cande y Agus resaltan la importancia de poner al mal tiempo buena cara, de aprender a disfrutar las pequeñas cosas y las travesías cotidianas.

Para Tatan, este período sirvió para “vivir un poco más el hoy y donde estamos ahora”. Por su lado, Agus piensa que es una buena excusa para seguir descubriendo Córdoba: “Tenemos paisajes majestuosos, tenemos gastronomía para todos los paladares, tenemos rutas para todos los inquietos”.

Gonzalo comparte un aprendizaje personal: “La lección más grande fue y es que siempre va a haber cuestiones ajenas que uno no va a poder controlar, pero lo que sí podemos decidir es cómo nos van a afectar y qué actitud tomar ante ellas”.

Y Cande cierra con un último consejo: “No dejar para después las cosas que uno quiere. Siempre hay alguna excusa y tendemos a postergarlas, no sólo en cuanto a los viajes sino con cualquier sueño u objetivo. Si los planetas más o menos están alineados, hay que hacerlo. La vida es ahora”.