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Tres balnearios, un arroyo increíble, flora y fauna autóctona del Valle de Calamuchita, naturaleza y tranquilidad a tan solo 120 km de la ciudad de Córdoba.
¿Sabías que es la localidad más joven del Valle de Calamuchita? Con una población aproximada de 400 habitantes, este paraje se presenta como el destino perfecto para una escapada de relax en las Sierras de Córdoba. Atravesada por el arroyo Amboy, en Villa Amancay no sólo podrás refrescarte en las aguas super transparentes que la recorren, sino que además tiene tres balnearios de fácil acceso y abundante flora y fauna autóctona para deleitarte.
El balneario La Cascadita tiene saltos de agua, piletones, mesas, asadores, todo bajo una gran sombra protectora de los rayos del sol. La Ollita: la más recomendada por los visitantes. La Pileta: arena, playas, agua pura para conectarse con un entorno natural increíble. Cuando cae la tarde, podés visitar la gruta Virgen del Carmen.
Esta localidad está muy cerca del Complejo Hidroeléctrico Río Grande, única en el país por el tipo de construcción (tiene una central de bombeo en caverna) que se convierte en una atracción turística imponente por su magnitud. El camino que te lleva hasta allí está pavimentado y es un gran circuito para practicar ciclismo. Hay dos embalses, Cerro Pelado y Arroyo Corto, separados por un camino de 12 kilómetros que atraviesa Amancay. Un dato: Cerro Pelado es un espejo de agua de ¡1.240 hectáreas! Buceo y pesca son las dos actividades favoritas del lugar.
La travesía en ciclismo recomendada es desde Villa Amancay hasta Embalse Cerro Pelado y luego hasta Embalse Arroyo Corto. Son 40 kilómetros de baja dificultad. Si elegís el trekking: se parte desde Embalse Cerro Pelado hasta el paraje Tigre Muerto, bordeando el lago (el más alto de Córdoba). Y si deseas practicar buceo, hay empresas que brindan excursiones.
Desde Córdoba, tomás la RN 36 y de allí la RP E63. El siguiente paso es la RP 5 y la RP 23 hasta la localidad. Si vas en cole, buses Lep hasta Santa Rosa de Calamuchita y, otro hasta el destino. Es un destino que vale la pena visitar si deseas encontrar paz y relajación. Tomarte unos días, alejarte del bullicio de la ciudad y sumergirte en el silencio encantador de Villa Amancay.
