La Cumbre: naturaleza de altura

"En lo alto: las estrellas, en el valle: las espinas y en el medio de mi pecho está La Cumbre de Punilla”. Así podría parafrasearse el reconocido verso nacional mientras uno comienza a transitar este territorio del Valle de Punilla, situado al oeste de la provincia de Córdoba.

Y es que los paisajes serranos de La Cumbre permiten disfrutar de la naturaleza y las actividades al aire libre con destacadas propuestas de turismo cultural e histórico.

Al arribar, se puede visitar la antigua estación del ferrocarril, hoy utilizada para brindar información turística y realizar actividades culturales; además de ofrecer propuestas que permiten conocer también el origen de los primeros fundadores.

En esta oportunidad, más allá de los clásicos atractivos de La Cumbre –como El Cristo, el inigualable olor a lavanda y los campos del complejo agroindustrial perfumista de Domaine de Puberclar, la posibilidad de volar en parapente y la visita a museos históricos, como la Casa Museo de Manuel Mujica Láinez y el Museo de Motos y Bicicletas–, la Secretaría de Turismo de la localidad invita a vivir la naturaleza en todo su esplendor.

LLEGAR AL VALLE DEL PINTOS NO ES FÁCIL. UNA VEZ SORTEADO EL DESAFÍO DEL CAMINO, Y YA EN LA ORILLA DEL RÍO, SE PUEDE DISFRUTAR DE SUS ARENAS Y SUS AGUAS LIMPIAS.

Respirar profundo y ascender

A solo ocho kilómetros de La Cumbre y subiendo por una ladera, se puede visitar el mirador de Cuchi Corral, cuyo nombre significa “corral de chancho”. Tiene inigualables vistas al valle y al río Pinto y, al despuntar el día, se pueden contemplar los atardeceres.

“Según la historia, el mirador de Cuchi Corral fue en la antigüedad sitio de oraciones indias, mientras que hoy es una plataforma para realizar actividades como parapente y ala delta”, cuentan al respecto desde la Secretaría de Turismo local.

Sobre el lugar, estuvo enclavado en una antigua estancia que fue declarada Lugar Histórico Nacional en 1945, ya que vio pasar los arreos de mulas rumbo al Alto Perú, según los historiadores.

Desde allí, también se puede llegar a la cascada de Cuchi Corral, luego de descender desde el mirador. Para esta caminata se recomienda tener estado físico y prever la habilidad de maniobrar el descenso. Además, requiere enfrentarse a posible vegetación cerrada y cruzar el arroyo para poder observar los distintos saltos del recorrido hasta llegar al río Pinto.

“Cruzando el río se encuentra un cementerio de más de un siglo y medio de existencia y, un poco más adelante, la Capilla de Pintos, que se terminó de construir en 1933”, detallan desde Turismo.

Un río que quiere ser reserva

Desde hace unos años y a través de procesos participativos y de investigación, La Cumbre se encuentra trabajando para declarar la Reserva Natural Cultural de usos múltiples Río Pintos, que permitiría proteger este enclave único.

El valle del Pintos es un lugar excepcional y llegar no es fácil. Una vez sorteado el desafío del camino, y ya en la orilla del río, se puede disfrutar de sus arenas y sus aguas limpias, que discurren entre grandes piedras de colores. Si se presta atención, en el fondo del curso de agua se pueden ver bagres y algunas truchas. Es un momento ideal para preparar el mate y sentarse a descansar.

Por otro lado, para los amantes de la aventura, todos los años en mayo se realiza el Desafío del Río Pinto (desafiopinto.com.ar) –la última edición se corrió el pasado 5 de mayo–, una carrea de mountain bike de diferentes categorías que recorre 85 kilómetros en el valle del Río Pinto con largada y llegada en La Cumbre. Una oportunidad para el deporte extremo en la naturaleza cordobesa.