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Cicloturismo Pampa de Olaen: postal de historia y paisaje

El circuito de 150 kilómetros, ida y vuelta, fue exigente para una sola jornada, pero el esfuerzo fue recompensado con uno de los parajes más encantadores de las sierras provinciales. Naturaleza y patrimonio se imponen en la solitaria postal.

El sábado de otoño se anunciaba espléndido. Sol, ausencia de viento y una temperatura ideal para arrancar la pedaleada hacia las sierras con el propósito de llegar a Pampa de Olaen, donde está la cascada del mismo nombre.

El objetivo por la distancia era ambicioso pero el estímulo del clima y el interesante programa lograron entusiasmar al grupo de ciclistas a rodar los primeros 60 kilómetros por pavimento y los últimos 15 por ripio.

La partida fue la ciudad de Córdoba con rumbo a La Calera para luego atravesar San Roque, Bialet Massé, Santa María de Punilla y arribar a Cosquín donde se hizo el primer descanso. A la vera del río Cosquín, protagonista de tantos temas del folklore nacional y escenario de frecuentes guitarreadas, el grupo aprovechó para hacer una pausa. De nuevo en marcha emprendió viaje hacia Molinari, pequeña localidad distante cinco kilómetros de Cosquín y al rodar sobre la ruta nacional 38 se observan varios complejos de cabañas y una estación de peaje.

Desvío

Tras superarla, sobre la mano izquierda comienza un camino de ripio señalizado con un pequeño cartel que anuncia Characato a 40 kilómetros y Villa de Soto a 86. Ese es el camino que conduce a Olaen, en una cuesta arriba con pronunciada pendiente.

En el trayecto una despensa serrana es motivo de descanso. Una original bienvenida nos dispensaron dos perros, un chancho y una oveja. En el patio se dejaron ver gallinas, patos, cabras y más ovejas. Sin dudas, el mejor sitio para hacer una pequeña merienda en el marco natural de una mansa postal rural.

De nuevo sobre los rodados, hicimos el tramo final hacia Pampa de Olaen, lugar que tiene como atractivos la cascada homónima y la capilla Santa Bárbara, separadas por poco más de dos kilómetros. Primero fuimos hacia el templo.

Santa Bárbara

Tras abrir una tranquera hay que avanzar dos kilómetros y ya se divisa la capilla cuyo techo rojo sobresale en el escenario de una total soledad.

Está rodeada  por un cerco de alambre tejido, una sola puerta de acceso, tres árboles en su parte delantera y un cartel que indica su antigüedad. Se la nota cuidada, y bien conservada.

Fue parte de la estancia que el obispo Diego de Salguero y Cabrera donó en 1760 para el mantenimiento del hospital San Roque de la ciudad de Córdoba.

El templo fue construido en 1750 y en sus líneas simples radica su atractivo. Una espadaña semicircular con dos orificios para campanas (no tiene) y muestra en su cúspide una cruz de hierro.

En el interior está entronizada Santa Bárbara con un puñal en su mano derecha que algunos adjudican a la leyenda de un gaucho que cometió después de cometer un crimen y no pudo despegarse el arma y arrepentido le suplicó a ayuda a la Virgen. Otros, afirman que Santa Bárbara intercede para “cortar las tormentas”.

Lo cierto es que cada 4 de diciembre el silencioso paraje se viste de fiesta para celebrar el día de Santa Bárbara. Así, fieles de distintos lugares y agrupaciones gauchas participan de la procesión y misa que culmina con una auténtica reunión criolla tradicional.

Cascada

El siguiente destino del programa fue visitar la cascada que parece escondida. Es una reserva natural ubicada a 20 kilómetros de la ciudad de La Falda. Se cobra entrada ($ 10 por persona); $ 50 para el acceso de automóviles y $ 30 para motos.

Apostamos las bicicletas dispuestos a caminar entre piedras y empinadas escaleras de madera. No es complicado porque se trata de un trecho corto.

En el lugar se observa el nacimiento de la cascada y se destacan tres caídas de agua importantes. El torrente se deposita en una  gran hoya rodeada de piedras en un marco de naturaleza absoluta que los fines de semana suele concentrar a algunos visitantes que mate en mano disfrutan de esa postal.

A desgano, el grupo de ciclistas, inicia el viaje de regreso a la ciudad de Córdoba.

Lo que hay que saber

Hoja de ruta: ciudad de Córdoba; Bialet Massé; Santa María de Punilla, Cosquín y  Molinari (por ruta asfaltada). De Molinari a Olaen por camino de ripio.

Total del recorrido: 150 kilómetros.

Servicios. En Olaen no hay comercios ni puestos de venta. Las últimas opciones son en Molinari y la despensa ubicada en el camino de ripio hacia Olaen.

Entrada a cascada. En la cascada de Olaen se cobra entrada. Por persona $ 10; autos $ 50 y motos $ 30.