Argentina posiciona su nueva marca país y se centra en nueve mercados internacionales

Con más provincias funcionando como puerta de ingreso al país, la conectividad aérea en Argentina no para de crecer. En diálogo con Voy de Viaje, el ministro de Turismo de la Nación, Gustavo Santos, habló sobre la situación actual del sector y las estrategias que se están empleando para el crecimiento de la actividad.

–¿Cuál es la importancia de tener un país con mayor conectividad aérea interna y externa?

–En un país como Argentina, extenso y ubicado en el extremo sur del planeta, la conectividad aérea es indispensable para el desarrollo de la actividad turística. Es un insumo vital para que el turismo siga consolidándose como un pilar de la economía nacional. En los últimos años, la conectividad mostró un gran crecimiento: un 25 por ciento en relación con 2015 en vuelos de cabotaje, y un 21 por ciento en los internacionales. Y ahora son nueve las provincias que funcionan como puerta de ingreso de turistas internacionales.

–¿Ya se empiezan a ver beneficios en las economías regionales?

–Los resultados de la Encuesta de Ocupación Hotelera, que refleja la actividad en todo el país, vienen dando cuenta de un crecimiento sostenido, con récords históricos, en los que la conectividad aérea ha hecho un gran aporte. Estamos atendiendo un reclamo eternamente postergado, que incluye una federalización del mapa aéreo argentino, con vuelos interregionales que no tengan que pasar inevitablemente por Buenos Aires.

–En estos últimos años, ¿qué acciones hizo Argentina para posicionar su marca país en el mundo?

–La novedad más importante sobre este tema es que tenemos una marca país rediseñada. Esto implica mucho más que un cambio estético, es una nueva forma de presentarnos ante el mundo, de dar cuenta de una nueva Argentina. Con la marca país actual, estamos poniendo en marcha diversas acciones de promoción turística en las que predominan las nuevas herramientas de comunicación digital por sobre las más tradicionales, presencias en ferias, centralizando la energía en mercados que nos interesan especialmente.

–¿Cuáles son esos mercados prioritarios?

–Son nueve: Brasil, Estados Unidos, España, Perú, Chile, Colombia, Alemania, México y China. Entre todos ellos, alcanzan el 80 por ciento de la meta de llegada de turistas para 2020.

–El hub Córdoba está generando un movimiento de turismo receptivo que la provincia no tenía. ¿Cómo se puede trabajar para mejorar el número de pernoctaciones en la ciudad?

–El hub de Córdoba aprovecha su ubicación estratégica, como gran conector entre el norte y el sur del país. Como en todos los destinos del mundo, la diversidad de la oferta y la calidad de los servicios son factores fundamentales para el crecimiento de la actividad. Hay que estar atentos a las nuevas tendencias, que van modificando los requerimientos de los viajeros, y responder a sus expectativas. Córdoba, destino emblemático del turismo nacional y con una oferta clásica consolidada, tiene mucho potencial para desarrollar desde el punto de vista de su naturaleza y también culturalmente.

–En pocos días, se desarrollará el CAF 2018 en esta ciudad. ¿Qué importancia tiene este congreso para la provincia, teniendo en cuanta que vuelve a ser sede después de siete años?

–Nuestro sector tiene un desafío extraordinario en este nuevo congreso: construir y ser protagonista de esta nueva etapa del turismo argentino, donde no me imagino sin los agentes de viajes trabajando en plenitud. La gama de oportunidades que se abren merece un espacio de reflexión para lo que se viene, en el cual podamos trabajar juntos, porque ese es el camino. Que Córdoba vuelva a ser la sede después de siete años da cuenta de un nuevo país, sin exclusiones. Córdoba había quedado relegada, castigada por ser de un color político diferente del Gobierno central. Por suerte, eso es pasado para cada una de las provincias. Hoy, todas vuelven a formar parte de Argentina.