buscar

Tierra del Fuego, zona norte: Río Grande, sus cabalgatas soñadas, su chocolate artesanal y su confitería emblemática

Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)

En Río Grande, el club de campo La Cimarrona ofrece cabalgatas en la costa argentina y en las estancias. Además, la chocolatería Mamá Flora, con raíces en Córdoba, se destaca por su origen. También, Tante Sara, un restó con historia, atrae a locales y turistas. Detalles de actividades tradicionales en la ciudad fueguina.

La provincia de Tierra del Fuego ofrece una amplia variedad de actividades para disfrutar de la “pequeña patagonia” ubicada en el fin del mundo. El territorio de la isla, en muy poca distancia de kilómetros, cambia su paisaje del bosque fueguino a la estepa. En ambos suelos, las propuestas culturales no dejan de sorprender al turista.

Si bien lo más popular entre los visitantes es Ushuaia, lo cierto es que el norte de la isla ofrecen actividades alucinantes y absolutamente diferentes. En esta nota, una recorrida por propuestas originales en Río Grande para disfrutar de otro paisaje en Tierra del Fuego.

En Río Grande, una familia campera te invita a disfrutar del campo

Río Grande es la zona más poblada de la isla, con cerca de 100 mil habitantes. Es la ciudad netamente industrial más austral de Argentina. También es conocida por ser la capital nacional de la trucha. Además, celebra por ley el título de “Capital Nacional de la Vigilia por la gloriosa gesta de Malvinas” que se realiza desde 1995 en vísperas al 2 de abril.

Rica en historia y cultura, Río Grande ofrece actividades que conectan al turista con la vida de campo. En una recorrida por la isla, Voy de Viaje conoció a La Cimarrona, un club de campo con 22 años de trayectoria que propone disfrutar de los caballos y de la vida campestre en la zona.

La familia anfitriona en La Cimarrona. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)
La familia anfitriona en La Cimarrona. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)

Se trata de un emprendimiento familiar que comenzó a funcionar el 5 de enero de 2002. Stella Maris Alazard, una de las integrantes de la familia fundadora, contó que el lugar recibe a personas de todas las edades que buscan disfrutar de la vida de campo, especialmente de los caballos. “Somos una escuela de equitación, tenemos deportes, tenemos una granja educativa, salón de eventos, es un lugar para que venga la familia a disfrutar. Estamos a pasos de la ciudad, en el corazón de Río Grande”, describió.

La familia anfitriona en La Cimarrona. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)
La familia anfitriona en La Cimarrona. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)

El lugar funciona todo el año. Realiza además cabalgatas a los alrededores: “tenemos el Cabo Domingo que es muy lindo acá en la zona de la playa; también la estancia María Behety que tiene el galpón de esquila más grande del mundo. Son lugares diferentes para hacer cabalgatas en pleno norte de Tierra del Fuego donde tenemos paisajes de estepa, ríos y costa del mar. Es otra Tierra del Fuego diferente que muchos no conocen”, recalcó Stella Maris.

Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)

Historia de La Cimarrona

Fundado por Stella Maris Alazard y su familia, dio sus primeros pasos en la Misión Salesiana como escuela de equitación criolla, realizando cabalgatas y las tradicionales Colonias de Vacaciones, luego fue incorporando disciplinas como salto hipico y en los últimos años un deporte totalmente novedoso en la provincia, y de la cual han sido pioneros en su práctica: el polo, realizando en el 2010 el 1er. Torneo en Tierra del Fuego, declarado de interés por la Municipalidad de Río Grande.

Hoy en día ubicada en el predio de la histórica chacra Raful, cuenta con un predio de 40 hectáreas de campo con quincho y salón principal para fiestas y eventos, una granja educativa con lagunas naturales aledañas a la Reserva Natural Urbana de Laguna de los Patos, un espacio de caballerizas y pistas de equitación en pleno corazón de la ciudad de Río Grande. Año a año sigue creciendo buscando inculcar los valores de tradición, esfuerzo, cariño y constancia para lograr que este maravilloso ser que es el caballo, sea disfrutado y respetado en toda su magnitud.

Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)
Cabalgatas en Cabo Domingo, Río Grande. (La Cimarrona)

Una pareja gaucha y talentosa

Los padres de Stella Maris cuentan con una rica historia relacionada a la música y a las tradiciones gauchas. Su madre, Chochi Arellano, tiene una voz privilegiada que entona con excelencia milongas sureras. La mujer fue para participar en el Pre Cosquín en 1982 en la Sub Sede Río Grande, ex Integrante de la Embajada “De Acaballo” por mi Patria”, que dirigió Jorge Cafrune. Arellano interpretaba música de la Llanura de su provincia natal, Buenos Aires.

En aquella oportunidad participó con dos temas y tuvo el honor de ganar la Sub Sede, como Vocalista “Solista Vocal Femenina”.

Su esposo, Cachi Alazard, fue Campeón Internacional de Jineteada en Palermo. Solía “Florear” La Milonga, con un estilo muy tradicional de esta provincia. Stella y Cachi fueron los pioneros en participar en Cosquín con la categoría “Solista con Floreador”.

La familia anfitriona en La Cimarrona. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)
La familia anfitriona en La Cimarrona. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)

Mama Flora, una chocolatería con historia

En 1988, Daniel Zapata y Susana Molayoli dejaron su Río Cuarto natal para hacer lo que muchos en esa época: instalarse en el sur para “probar suerte”.

Después de breves pasos por otras zonas de la Patagonia, la pareja cordobesa eligió Río Grande para forjar su historia. Por entonces, Daniel trabajaba en el Correo Argentino y Susana era maestra de grado.

Daniel se quedó sin trabajo unos diez años después, y ante el imprevisto comenzaron a pensar de qué forma podrían generar una nueva fuente laboral. Un viaje por Villa General Belgrano los inspiró en la idea de crear una chocolatería artesanal en la ciudad fueguina, teniendo en cuenta que no existía nada similar por aquellos años.

Chocolatería Mamá Flora, un clásico de Río Grande. (Voy de Viaje)
Chocolatería Mamá Flora, un clásico de Río Grande. (Voy de Viaje)

De esta forma, un 25 de octubre de 1999 nació “Mamá Flora”. El nombre fue en honor a la mamá de Daniel, a quien le llamaban de la misma manera.

Lo anecdótico de este lugar, que ya es emblemático en la ciudad, es que fue la propia Celia B. de Degiovanni, fundadora de la escuela gastronómica que lleva su mismo nombre, quien viajó a Río Grande para enseñarles a los cordobeses cómo trabajar el chocolate.

Celia viajó al sur un mes antes de la inauguración del local y, además de enseñarles el oficio, les dió tips y consejos que Mamá Flora mantiene hasta el día de hoy.

Chocolatería Mamá Flora, un clásico de Río Grande. (Voy de Viaje)
Chocolatería Mamá Flora, un clásico de Río Grande. (Voy de Viaje)

Al tratarse de una ciudad en la que no predominan los turistas, Celia aconsejó a los cordobeses que apuntaran a un producto de calidad, puesto que su público principal serían los mismos habitantes de allí. Era fundamental la calidad de los productos y el trato con los clientes para que éstos quisieran volver todas las veces.

Con todos los conocimientos adquiridos, la pareja inauguró la chocolatería y ya lleva 25 años siendo elegida por los riograndenses y los visitantes. Daniel falleció hace algunos años y, en la actualidad, el proyecto familiar es llevado adelante por Susana y su hija Agustina.

Chocolatería Mamá Flora, un clásico de Río Grande. (Voy de Viaje)
Chocolatería Mamá Flora, un clásico de Río Grande. (Voy de Viaje)

Tante Sara, una confitería emblemática de Tierra del Fuego que nació en Río Grande

En 1972, Don Luís Requejado y Doña Sara Klaus de Requejado llegaron a Ushuaia cuando la ciudad apenas contaba con una población aproximada de 6.000 habitantes.

Su incursión en el ámbito gastronómico comenzó en el Hotel Antártida, donde las “medialunas del Tío Luís” se volvieron un deleite para las tardes en Tierra del Fuego. Basándose en las recetas familiares de Sara, de origen en la repostería artesanal alemana, lograron productos de alta calidad y exquisito sabor.

En 1975, trasladaron su emprendimiento a la ciudad de Río Grande, marcando así los primeros pasos de lo que se convertiría en una destacada empresa gastronómica de la región. Nació entonces la Confitería Tante Sara, ubicada en las calles Padre Beauvoir y El Cano.

Tante Sara, famoso por sus medialunas. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)
Tante Sara, famoso por sus medialunas. (Magalí Gaido/Voy de Viaje)

En 1988, Luis Requejado hijo asumió la dirección del negocio familiar junto a su esposa, Susana Carrere. Si bien Tante Sara ya era reconocida por su calidad, con la llegada de Susana se sumó una nueva característica distintiva: el buen gusto.

Con sus tortas y sus famosas medialunas, Tante Sara creció junto a Tierra del Fuego y se convirtió en la tradicional marca de la gastronomía fueguina. Actualmente, además del local en Río Grande, tienen otras dos sucursales en Ushuaia.

“Lograr el reconocimiento de tantos años es gracias, no solo al equipo de trabajo que formamos y sentimos como una gran familia, si no a la elección de materias primas de calidad, la elaboración y presentación de cada uno de nuestros productos”, aseguran desde la empresa gastronómica que lleva más de 40 años deleitando a fueguinos y turistas.

#VivoEnUshuaia Tante Sara
#VivoEnUshuaia Tante Sara

DATOS ÚTILES

Más información sobre actividades, servicios y prestaciones habilitadas en Tierra del Fuego: www.findelmundo.tur.ar