Tafí del Valle, naturaleza a cielo abierto

Ola de frío en todo el país. El arribo a Tafí del Valle es de noche, por la escasez de combustible y por arreglos en la ruta que exige numerosos desvíos.

Tafí es una ciudad ubicada a 2 mil metros de altura y a la que separan 107 kilómetros de San Miguel de Tucumán.

En el trayecto pasamos por Yerba Buena, hoy ciudad residencial, ubicada en la periferia capitalina. Campus universitarios, countries y coquetos jardines son el común denominador.

Se transitan las rutas nacional 38 y provincial 307 por caminos de cornisa que conducen al valle de Tafí, cuña que separa las sierras del Aconquija por el sur y las cumbres Calchaquíes al norte. En ese trayecto acompaña el curso del río Sosa. Siguen las bajas temperaturas, hasta arribar al hotel boutique Castillo de Piedra.

Un magnífico hogar donde arden generosos leños, es la cita obligada en la planta alta. Las llamaradas de los leños se reflejan en la pared de cristales, que también muestra las luces del pueblo. Unos reconfortantes mates son el preludio de la cena.

Nos recibe Soraya Gutiérrez, la seductora anfitriona quien comenta que el rigor de este invierno es inusual en la zona. Días previos a nuestra llegada el río Sosa amaneció congelado al registrarse temperaturas de 12 grados bajo cero.

Una copa de vino tinto Julio Julián y los acordes de jazz andino del grupo Bolivian Jazz amenizan el lugar perfecto en el momento ideal.
Castillo de Piedra, a un kilómetro y medio de la Villa de Tafí, se levanta en una superficie de siete hectáreas entre una generosa arboleda de más de cien nogales, huerta ecológica y abajo, la marcha del río La Banda, que marca el límite del terreno.

El estilo de construcción se basa en los viejos cortijos españoles del siglo XVII. Cuenta con cinco habitaciones, con o sin hidromasaje, calefaccionadas; sauna; piscina, y varias salas de estar ambientadas con tapices, mantas, textiles y mobiliario de la región.

Castillo de Piedra integra la Ruta Gourmet Alta Argentina, que tiene como premisa el uso de recursos naturales y culturales que concentran los valores esenciales de las comunidades alto-andinas del noroeste argentino.

Una exquisita cena gourmet acompañada de buenos vinos locales, como El Patriarca, encienden la conversación en la que las preguntas de las visitas encuentran las respuestas de los locales.

Caminatas; eco-meditaciones; trekking y montañismo; turismo rural; visitas a museos; cosmética artesanal; Internet y sala de TV satelital, y traslados y excursiones completan la oferta del lugar.

La mañana, plena de sol, descorre el velo sobre los paisajes que la noche cubría. Caballos y burros pastan y una caminata a la vera del río descubre las ramas de arbustos congeladas.

Capilla y Museo jesuítico. A unas cuadras del centro de Tafí del Valle y a metros del hotel se encuentra la capilla de La Banda y el Museo Jesuítico.

En esas viejas construcciones de la orden religiosa, que datan de 1718, se encuentran buenos capítulos de la historia, la religión y la arqueología del norte argentino.

El pago de sólo $ 5 habilita a un mundo de arcones, casullas, imágenes cuzqueñas y ropas de los jesuitas del siglo XVIII, contenidos entre los gruesos muros de adobe y techos de vigas.

La pequeña capilla convoca a misas todos los sábados y deja ver, oculto en un rincón del altar, un túnel de 300 metros de largo que conduce al cerro La Cruz y que los jesuitas tenían como vía de escape ante un eventual ataque de los aborígenes quilmes.

La Virgen del Carmen y dos pinturas cuzqueñas entronizan el altar, bancos originales destinados a la feligresía y un antiguo confesionario representan el mobiliario.

Tras la expulsión de los jesuitas de América, el gobernador José Frías Silva tomó posesión de la construcción, hasta que finalmente fue expropiada. Parte del mobiliario de esa familia ambienta las distintas salas.

El lugar conserva las aberturas originales, con postigones de madera e imágenes religiosas que son sacadas en la procesión de la Fiesta del Misachico, que se realiza cada 24 de septiembre para recordar la batalla de Tucumán.

Sacristía, sala de reunión, comedor con una araña de luces de velas, sala de paso y dormitorio depositan en los patios que hoy dan cobijo a gallinas y pollitos, que deambulan en la fría mañana y reeditan postales de hace casi 300 años. El conjunto histórico se ubica en la avenida de los Jesuitas al 400, de Tafí del Valle.

El soleado día invita a las caminatas que se interrumpen sólo para reunir en torno a la mesa con gastronomía regional. Un broche ideal para el altamente recomendado destino al natural.

Lo que hay que saber

Aéreo. Con Sol S.A. Líneas Aéreas, directo Córdoba/San Miguel de Tucumán $ 438 con impuestos.
Taxi. De aeropuerto al centro capitalino, $ 40.

En San Miguel de Tucumán
Alojamiento.
Hotel Francia 3*. Una trayectoria de 48 años consolida a una familia de hoteleros. Tarifas temporada media (de agosto a diciembre).
Habitación single $ 319 ($ 287 por pargo en efectivo); habitación doble, $ 399 ($ 359 por pago en efectivo), y habitación triple, $ 481 y por pago en efectivo, $ 433. Informes: Crisóstomo Álvarez 467, teléfono (0381) 431-0781. E-mail: reservas@hotelfrancia.com.ar

Gastronomía
Tallarines con pollo, bebida y postre, desde $ 24.
Ravioles con salsa mixta, bebida y postre, $ 25.
Porción de carne o pollo, $ 7.
Pizzas, desde $ 26.
Sándwich de milanesa (un clásico en Tucumán), $ 14.
Hamburguesa, $ 13.
Lomito, $ 15.
Empanadas, la docena, desde $ 30.
Menú ejecutivo (entrada, plato principal, bebida y postre), $ 39.

En Tafí del Valle
Hotel boutique Castillo de Piedra. Almuerzo o cena (entrada, plato principal y postre), $ 150 por persona.
Alojamiento: habitación doble, $ 800 y en doble estándar, $ 730 por noche. La tercera noche con desayuno, $ 410, y por tres noches, $ 1.910.

Gastronomía
Asado de tira para dos, $ 58.
Locro, $ 29.
Humita en olla, $ 28.
Empanadas por unidad, $ 4.