El Nihuil, la playa mendocina que seguro no conocías

Falta muy poco para que empiece el verano y lleguen, para muchos, las ansiadas vacaciones. En ese marco, la mayoría piensa en la Costa atlántica, pero la realidad es que existen muchas otras opciones en Argentina para disfrutar del sol y el agua. Una de ellas es El Nihuil, una playa de agua dulce en Mendoza.

El lago en este destino es grande y claro, y está rodeado por dunas de arena que alcanzan hasta 200 metros de altura y abarcan 30 mil hectáreas. Es, sin duda, un gran espacio para relajarse y entrar en contacto con la naturaleza.

Ideal para los fanáticos de los deportes acuáticos y terrestres, permite practicar natación, senderismo, equitación, pesca, kitesurf y kayaking, entre otros.

Otra opción: ¡Alta laguna! Conocé este espejo de agua mendocino.

Y si bien el nombre del lugar puede no resultar familiar para muchos, es casi imposible que no hayan escuchado hablar del Cañón de Atuel, cuyas aguas bajan por una sinuosa cuesta desde El Nihuil.

Esculturas naturales

El Cañón de Atuel, que comienza en el Embalse El Nihuil, tiene una extensión de unos 56 kilómetros y en cada una de sus capas de tierra y piedra están registrados los orígenes del mundo.

Sus rocas fueron erosionadas y talladas por el viento, creando esculturas naturales conocidas como Museo de Cera, Sillón de Rivadavia, El Lagarto, Los Viejos, Los Monstruos, La Ciudad Encantada, El Mendigo y Los Jardines Colgantes, entre otras.

Quizás te interese: Aventura y buen vino en el Valle de Uco.

¿Cómo llegar?

La manera más sencilla de llegar es contratando una excursión, ya que existen diversas experiencias para todo tipo de viajeros. Otra alternativa es ir en auto particular: para eso hay que salir desde San Rafael rumbo a la ruta provincial 143 y después tomar el cruce con la ruta provincial 180.