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Agustín Neglia: “Aprendimos a mirar un poco para adentro... y a cultivar la paciencia”

El conductor de Modo Selfie, que el fin de semana recorrió Córdoba, dialogó con Voy de Viaje y contó detalles de su apuesta por el país y los cambios por la pandemia.

Decir que la pandemia cambió la forma de ver, entender y disfrutar del turismo, es una obviedad. Pero a cada uno lo afectó de un modo muy distinto, impensado. Hace 16 meses, si le sugerían a Agustín Neglia que iba a suceder algo parecido a lo que finalmente sucedió, ni siquiera lo hubiera creído. Tampoco podía pensar en aquel momento que la estructura de su programa Modo Selfie debía adaptarse, y cambiar la ecuación de sus contenidos.

"Fue un buen año para nosotros, porque descubrimos cosas que el público no nos hubiera permitido. Antes, colábamos algún capítulo de Argentina, entre Grecia, Italia, España... y con miedo. Hoy nos cambió ese paradigma", aseguró Agustín en diálogo con Voy de Viaje.

Modo Selfie emitió anoche el primero de cuatro episodios dedicados íntegramente a Córdoba, donde mostró la Capital provincial, Villa Carlos Paz, La Cumbrecita y Villa General Belgrano. Pero además, viene mostrando el país. “La gente empezó a respetar más lo local, y se da cuenta de que son destinos muy lindos, la experiencia es totalmente genuina... y la relación precio-calidad es incomparable”, agregó.

Al frente de sus entregas, Agustín retomó la senda de los viajes en agosto de 2020, y apenas tuvieron dos internacionales: a España en junio y a Miami en diciembre.

“En aquel momento en Estados Unidos, casi no hicimos contenidos. Entendemos que tenemos que mostrar lo que la gente puede hacer. El desafío fue hacer lo que la gente podía hacer, los destinos que podía conocer”, detalló.

La incorporación de Modo Foodie es un complemento ideal, permite a los habitantes de las ciudades descubrir los secretos a la vuelta de la esquina. “Es una guía práctica para viajar y comer. Este año nos posibilitó filmar mucho en los restaurantes que son joyitas de cada lugar”.

Córdoba, Mendoza, la ruta de las medialunas de Mar del Plata, Buenos Aires, aparecieron con sus mejores representantes en pantalla.

Mendoza y Córdoba

El programa de este domingo es parte de toda una acción de grabar por la Argentina, visitando ciudades y provincias, desde lo menos conocido hasta aquellos destinos muy solicitados. Neglia menciona siempre a Ushuaia, Bariloche, Iguazú, y por supuesto Mendoza y Córdoba.

Él es mendocino, pero dice que su mayor comunidad en Instagram es cordobesa. “Es la primera provincia a la que le vamos a dedicar cuatro capítulos”, dijo, y que desde que anunció su parada cordobesa (estuvo de un miércoles a un domingo) le escribieron miles de personas. “Es la provincia de la que más seguidores tengo, y me recomendaron dónde no podía dejar de ir... en unos 40 días voy a filmar los otros dos capítulos”.

Agustín dice que le recomendaron salir de lo clásico. “Me dijeron: está bien Carlos Paz, están bien La Cumbrecita y Villa General Belgrano o Córdoba, pero hay un montón de lugares por descubrir. Son esos secretitos que los cordobeses tienen muy bien guardados”.

Sobre su provincia, destacó dos destinos: “Hay un lugar que hoy es como la Suiza Argentina: La Carrera, y está en Tupungato, detrás de todas las bodegas. Es un valle divino que tiene muchos árboles, con arroyos, caballos, propuestas de alojamiento interesantes. Va a ser la estrella del turismo en 10 años”. Y el Valle de Uco, con las mejores bodegas y viñedos. “Este verano fue un fenómeno el valle porque cada bodega tiene además sus propuestas gastronómicas, con chefs que hoy son como rock stars. Hay un restaurante que se llama Súper Uco, entre viñedos, con decks y carpas tipo beduinas, que no se puede creer. Son cosas que no las vivís afuera”.

Enseñanzas

Neglia cree que el ritmo de vacunación es alentador, y que de su reciente viaje a Europa se trajo una certeza: allí radica la clave para recuperar cierta normalidad en materia turística (pero no exclusivamente). Dijo que, estos 16 meses que transitaron, también nos permitieron algunos aprendizajes.

“Aprendimos a mirar un poco para adentro, a ver cómo estamos como país en cuanto a lo turístico. Se trabajó mucho para mejorar la infraestructura”, dijo.

“Y después...  aprendimos a cultivar la paciencia, todos tuvimos que aprender y aceptar las cosas. Si al principio me contabas esta historia, hubiera dicho que era imposible que pasara. Ahora, somos más flexibles. Quien no supo templar su temperamento no sé cómo vivió”.